La hinchada ya no aguanta más

Se escucharon cánticos en contra de los jugadores y el equipo fue silbado.

UNA FIESTA. El sector de la hinchada que se ubica en el sector de la calle Bolívar dio un espectáculo de bengalas. UNA FIESTA. El sector de la hinchada que se ubica en el sector de la calle Bolívar dio un espectáculo de bengalas.
Gustavo Rodríguez
Por Gustavo Rodríguez 06 Marzo 2010
Es tan irregular el presente de San Martín que hasta la hinchada está dividida. La fracción que se ubica en la tribuna de la calle Rondeau cuestionó al equipo, mientras que los de la Bolívar alentaron sin parar. Eso sí: a la hora de despedir a los jugadores la silbatina fue unánime. Los chiflidos surgieron de todos lados.
Este era el partido que San Martín necesitaba ganar. Los tres puntos eran claves para saldar la deuda futbolística que mantiene con el público el conjunto que dirige Carlos Roldán. También habría servido para despejar los nubarrones que se instalaron en La Ciudadela a causa de la deuda salarial que mantiene la institución con los jugadores. Pero pasó todo lo contrario. El "santo" empató con un rival que venía de cuatro derrotas consecutivas y, con este resultado, lentamente se va despidiendo del ascenso.
El público, como siempre, apoyó. Hasta el final de los primeros 45' el aliento fue constante; sólo se escucharon algunos insultos aislados de los desaforados que nunca faltan. Hasta se disfrutó de un espectáculo de bengalas en el entretiempo. Pero con el correr de los minutos la paciencia se acabó. "La camiseta del 'santo' se tiene que transpirar" y "pongan huevos la p..." fueron los cánticos que retumbaron en La Ciudadela.
Esa fue la clara señal de que los simpatizantes no aguantan más. Exteriorizaron su malestar por la falta de resultados positivos, una reacción lógica.
La hinchada siempre está, contra viento y marea. Nunca deja de respaldar; pero en algún momento debía decir basta.

Comentarios