"De a poco cada vez somos más las mujeres que dirigimos, y no sólo dramas o películas de romance. Cuando te señalan con el dedo para marcar que tus películas están bien hechas, y que parecen realizadas por un hombre, quienes quedan en ridículo son los que lo afirman. Para mí, el cine no es cuestión de géneros". Así, sin vueltas, responde Kathryn Bigelow, la realizadora de "Vivir al límite", que el 7 de marzo podría convertirse en la primera mujer en ganar un Oscar a la mejor dirección o a la mejor película.
Mientras aboga por una mayor presencia femenina en la silla de directora, confirma que en sus películas abunda la masculinidad como tema. "Pero no es una cuestión de género, creo que la camaradería en sí misma es muy buena. Los hombres tienen esa adrenalina que quizá les falte a muchas mujeres", le dijo al diario Clarín.
Bigelow, a punto de cumplir 60 años, no asume su condición de mujer como condicionante de estilos o temáticas, y de hecho sus filmes suelen ser de acción, con abundante violencia ("Punto límite" o "Días extraños", sin ir más lejos). "No lo veo como una elección de géneros ni de estilo. Me interesa el material que puede ser experimentado por el espectador. Creo que el cine es mejor para eso que para ser reflexivo. Te puede poner en un lugar que te imaginas y hacerte experimentarlo. Siempre me sentí atraída hacia películas que provocan eso. Pero no sé por qué no hay más mujeres que hagan este tipo de cine", le contó a La Nación. Bigelow logró con su película nueve nominaciones al Oscar, la misma cantidad que James Cameron, su ex marido, con "Avatar". Y para la crítica internacional, "Vivir al límite" es la gran favorita. Hasta ahora ella le ganó un premio al mejor director, que entrega el sindicato de directores. Ella comparte con Lina Wertmüller, Jane Campion y Sofia Coppola, el privilegio de ser las únicas mujeres nominadas al Oscar a mejor directora, aunque ninguna de ellas lo ganó.
"Vivir al límite", que se presentó en el Festival de Cine de Mar del Plata el año pasado, trata sobre un soldado norteamericano, especialista en desactivar bombas, durante la guerra en Irak. Bigelow rodó el filme en Jordania, con actores prácticamente desconocidos. "Me servía para potenciar el estado de realidad que quería que sintiera el espectador al no reconocer en los rostros a los protagonistas. Quería que el público sufriera la tensión acompañándolos en Irak", explicó. Actúan, sí, Ralph Fiennes y Guy Pearce, en pequeños papeles. "Sabía que Jeremy Renner (el protagonista) iba a conquistar el personaje, que lo iba a hacer suyo y expresar lo que le pasara por dentro. Es que si estás apostado en Irak, la terrible realidad es que no sabés si vas a volver. Si hubiera puesto en el papel del sargento a Tom Cruise, el público sabría de antemano que él iba a vivir hasta el último rollo de la película, por lo menos", aclaró. El próximo proyecto de Bigelow podría traerla a la Argentina, para filmar "Triple Frontier", otro dama bélico. La película se basará en los artículos que el periodista artículos de David Rohde publicó en "The New York Times", sobre su propio cautiverio en Afganistán y Pakistán, hasta junio de 2009.
El brillo de la tercera esposa
Kathryn Bigelow y James Cameron estuvieron casados desde el 17 de agosto de 1989 hasta 1991. Ella fue la tercera de las cinco esposas que hasta ahora tuvo el director de "Titanic". "Vivir al límite" está nominada al Oscar a mejor película, dirección, guión, actor (Jeremy Renner), fotografía, edición, banda de sonido, edición de sonido, y mezcla de sonido.
En los dos primeros ítems comparte la nominación con Cameron, quien no duda en elogiar a su ex esposa. "Existen muchas posibilidades de que 'Vivir al límite' sea el 'Pelotón' de la guerra en Irak", dijo en referencia a la película de Oliver Stone sobre la guerra en Vietnam.
Además, y más allá del récord de recaudación y permanencia que ostenta "Avatar", los presupuestos con que trabajaron los directores es bastante disímil: 250 millones de dólares necesitó Cameron, y 11 millones Bigelow con su producción independiente.