RENDIDOS A SUS PIES. De Santis explica los ejercicios y los jugadores prestan atención. "Chiche" Sosa, con lentes de sol, escucha al preparador físico. El plantel continúa la puesta a punto. ROLANDO DIAZ - ESPECIAL PARA LA GACETA
Hace 26 años, Hollywood cayó aterrado a los pies del director Wes Craven, un as a la hora de trasladar al guión las andanzas de Freddy Krueger. Era el hombre de las garras malditas, imbatible cuando los protagonistas ponían la cabeza en la almohada. La leyenda urbana del demonio del séptimo arte tuvo varias secuelas. Incluso, llegó a cruzarse en el Siglo XXI cara a cara con Jason Voorhees, el temible depredador de Martes 13, otro clásico de la pantalla grande...
Lejos de las bambalinas y de los sets de filmación, en "La Linda", un grupo vestido de celeste y blanco padece la noche tanto como el día. A los jugadores les cuesta conciliar el sueño cuando a su cabeza viene el nombre de Ricardo de Santis, un tipo de cara amigable, trato gentil y muy predispuesto. A simple vista, el "Profe" es un angel, aunque a la hora de trabajar se convierte en un demonio. Las arduas tareas que De Santis les exige a sus pupilos durante primera semana de pretemporada de Atlético son un parto para los jugadores que, literalmente, terminan "rotos".
"Gracias a Dios el grupo está muy bien, responde a las exigencias", se relame De Santis, cuyas rutinas están cargadas con dinamita. El calendario así lo requiere, por supuesto, sobre todo en esta semana, la de mayor polenta física. "Mañana (por hoy) vamos a hacer un circuito en espacios muy cortos. El viernes es el último día de fuerza y potencia, pero en pendiente. El sábado será en doble turno y el domingo... Evaluamos darle un descanso a los muchachos", deja a la luz la agenda de "castigos" el "Profe", mientras Páez, entre bromas, pide un recreo. Todo sea por volver a soñar con los angelitos durante el Clausura.








