El espíritu del rugby les salvó la vida

Esfuerzo, sacrificio, solidaridad, disciplina y trabajo de equipo fueron las palabras más utilizadas por Antonio Vizintín, o "Tintín", como le gusta que le llamen. Este corpulento uruguayo, de voz calma, es uno de los sobrevivientes de la tragedia de Los Andes, ocurrida el 13 de octubre de 1972, cuando un avión se estrelló en las montañas. Vizintín tenía 19 años y, a pesar de que no le gusta el rótulo, fue uno de los héroes de aquella épica historia. Fue uno de los expedicionarios y de los que se arriesgó para que 16 sobrevivientes hoy puedan contar las experiencias vividas a 30º bajo cero, a 4.500 metros de altura y rodeados por un inmenso manto blanco. "No nos gusta que nos llamen héroes, sólo nos tocó estar ahí y vivir esa experiencia. En todo caso todos somos héroes, o los verdaderos héroes son los amigos que se quedaron allá", resaltó "Tintín" durante la charla.

-¿Cuál fue la clave para aguantar 72 días en la montaña?
- El trabajo en equipo fue fundamental. Lo que hizo cada uno fue importante. Hasta los que estaban enfermos o golpeados colaboraban en limpiar el lugar donde dormíamos, o en coser para hacer las bolsas de dormir. Cada uno cumplía su función y todos estuvieron detrás del objetivo, que era salvarnos. A algunos nos tocó ser expedicionarios, pero hubo otros que se sacrificaron para cuidarnos, para que estuviéramos bien antes de cada expedición.

-¿Cómo se logró mantener la calma?
-Hubo una persona fundamental. El capitán Marcelo Pérez fue quien nos mantuvo con el optimismo en alto. Allí uno se da cuenta de la importancia del capitán en un equipo de rugby. Todo lo que él decía se cumplía y a nadie se le ocurría objetar nada. En el momento de mayor caos el capitán fue importantísimo. Era el que nos daba la esperanza. Fue una lástima perderlo. No sobrevivió al alud y entonces la responsabilidad, casi sin proponerlo, comenzó a pasar por los primos Strauch. Ellos fueron los que tomaban las decisiones y el cerebro de todo.

-En la película no se aprecia mucho el rol del capitán.
-Es cierto, es una de las grandes fallas de la película. Marcelo fue el gran líder y lamentablemente eso no está reflejado en la película "Viven". El libro me gustó mucho, pero la película no.

-Su experiencia le debe haber servido en la vida...
-Cada cual vive su propia cordillera. Por eso es importante que la gente sepa superar las adversidades que se presentan. Nosotros pudimos salir de la cordillera luego de 72 días y ahora podemos contarlo. En esa época éramos unos inconscientes. Con el tiempo tomamos conciencia de lo que vivimos. Es importante que cada persona también pueda superar los desafíos. Todo es posible.

-¿Cómo fue el tema de la antropofagia? ¿Fue difícil la decisión?
-Teníamos que vivir. Un día se tomó la decisión y sabíamos que era nuestra oportunidad para salvarnos. Hasta entonces, hasta llegamos a comer pasta dental. Incluso bebimos el aceite del avión y la espuma de afeitar terminó siendo un licor espectacular. Pasamos por muchas cosas. Esa, quizás, fue la más difícil. Pero me permitió estar hoy y poder contarles la experiencia a ustedes.

Fue una noche especial en Marcos Paz

La charla de Antonio Vizintín en Tucumán Rugby y el encuentro con el público se produjo en un auditorio colmado, que superó todas las previsiones (había 1.000 sillas y la audiencia casi fue duplicada).  Fabián Landa, una de las viejas glorias del club, fue el encargado de realizar la presentación y de poner en clima a la conferencia.
"Estoy feliz de estar en un club de rugby de Tucumán. Su juego ha traspasado las fronteras y se hizo muy famoso en el mundo. Por eso es bueno compartir con ustedes este momento", fueron las primeras palabras de Vizintín.
Luego de la presentación pasó un video de 16 minutos con imágenes de sus vivencias en la cordillera y con un emotivo relato. Más de uno dejó escapar una lágrima. Fue conmovedor.
Luego narró paso a paso su experiencia, no sólo en Los Andes. También aportó anécdotas vividas por los distintos lugares del mundo a los que fue a brindar conferencias.
Tras su repaso de la experiencia en Los Andes, Vizintín se abrió a las preguntas. Fueron muchas, y a pesar del frío de la noche las contestó una a una.
Pasó Vizintín por Tucumán. "A 37 años de la tragedia pudimos conocer a uno de los sobrevivientes, estar cerca de él. Fue emocionante", dijeron varios al retirarse.