Durante el expresionismo alemán, temas del folclore judío derivaban en clásicos del cine fantástico como "El Golem", pero con el paso del tiempo, una película que apele a esta tradición se vuelve necesariamente original, y este es precisamente el caso. La historia da varias vueltas para llegar al punto en cuestión, que podríamos describir como un exorcismo realizado por un rabino para liberar a una chica del acoso de un espíritu o demonio de la mitología hebrea llamado Dibuk.
Odette Yustman interpreta a la estudiante y baby sitter que tiene una mala noche cuidando a dos hermanitos; el más grande realiza un extraño ritual sobre el otro, un bebé de pocos meses, y la golpea en un ojo con un espejo. La pobre chica ya había empezado a tener extrañas pesadillas, que a partir de este episodio se convierten en espantosas visiones a plena luz del día, algo que le preocupa seriamente debido a los antecedentes de problemas mentales de su difunta madre suicida. Explorando su pasado familiar, la protagonista descubre secretos ocultos que la llevan primero a un asilo de ancianos a ver a una misteriosa señora europea sobreviviente de Auschwitz, y luego a un rabino, tal vez el único con la audacia para realizar un exorcismo judío. El ritual es complejo y tiene códigos que no son los mismos que se vieron en filmes como "El exorcismo de Emily Rose" o la ya clásica "El exorcista".
A Gary Oldman le toca el insólito papel de exorcizar espíritus infernales, pero no en latín sino en idish, un rol que hasta ahora nunca había interpretado y que representó, según confesó el mismo actor, "un desafío muy grande y extenuante".
The Unborn
Género: terror
Director: David Goyer
Protagonistas: Odette Yustman y Gary Oldman
Duración: 87'
Calificación: PM13