
RUMBO A TRINIDAD. El mandatario estadounidense abandona México, donde realizó una visita relámpago. REUTERS

PUERTO ESPAÑA.- El presidente de EEUU, Barack Obama, espera un entendimiento con los líderes del hemisferio durante la V Cumbre de las Américas, que se inicia hoy en Trinidad y Tobago, para frenar críticas a la política de Washington sobre Cuba y terminar con los choques de los últimos años entre su país y la región. En 2005, la cumbre de Mar del Plata concluyó con sonoras divergencias, alimentadas por el más notorio aliado de Cuba, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, un feroz crítico de las políticas del antecesor de Obama en la presidencia, el conservador George W. Bush.
La isla siempre presente
Washington quiere que la cumbre de Trinidad se centre en cómo enfrentar la crisis económica mundial, que amenaza con revertir el reciente crecimiento en América latina y el Caribe y enviar nuevamente a millones de personas a la pobreza. Pese a su ausencia, Cuba seguirá estando presente en los debates y pesando en la relación de EEUU con Latinoamérica. Tanto Chávez como el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, han manifestado su oposición a la política de Washington de larga data de tratar de aislar a Cuba. “Cuando en un grupo de 34 países, casi todos tienen relaciones normales con Cuba, el que está equivocado es el que procede de forma distinta”, dijo un diplomático brasileño de alto rango. El propio Obama instó ayer, en un artículo de opinión publicado por un diario estadounidense, a no enfrascarse en viejos debates. “Hay que elegir el futuro, porque allí tenemos enormes oportunidades si trabajamos juntos”, escribió, y exhortó a la cooperación en cuestiones fundamentales, como la recuperación económica, la energía y la seguridad. Obama tendrá que convencer a los líderes regionales con quienes se reunirá en Trinidad que la era de Washington dictando la política “a su patio trasero” ya terminó, dijeron analistas. “Se concentrará más en mostrar una cara amable y ofrecer diálogo y cooperación”, comentó una fuente de Washington. (Reuter-AFP-NA)
“Ojalá que no siga el ejemplo del rey de España”
CUMANA, Venezuela.- El presidente Hugo Chávez expresó ayer, al inaugurar la cumbre del ALBA, que espera que en Trinidad el presidente estadounidense, Barack Obama, no lo haga callar, como lo hizo el rey Juan Carlos de España durante la Cumbre Iberoamericana en Chile en 2007. “Ojalá que no siga el ejemplo del rey de España, cuando me dijo “¡por qué no te callas!”, declaró Chávez. Los gobernantes de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) afinaron durante un cónclave en esta ciudad la “artillería” que llevarán hoy a la cumbre en Trinidad.
A la cita asistieron los presidentes Raúl Castro (Cuba); Evo Morales (Bolivia); Manuel Zelaya (Honduras); Daniel Ortega (Nicaragua) y el primer ministro Roosevelt Skerrit (Dominica). También asistieron como invitados el mandatario de Paraguay, Fernando Lugo, y el premier de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves. No asistió el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa.
Estocadas a muerte
Chávez anticipó que vetará la declaración de Trinidad y Tobago, y que para ello tiene el apoyo de otros líderes aliados, que no mencionó. “De la cumbre de las Américas no tenemos grandes expectativas. Hay una declaración que es difícil de asimilar. Está totalmente descolocada en el tiempo y en el espacio”, dijo Chávez, que proclamó el fin de estos encuentros regionales. A su vez, el mandatario cubano opinó que la Organización de Estados Americanos (OEA) tiene que desaparecer. Castro dijo que su país no busca regresar a la OEA, de la que fue marginada en 1962 por presiones de Washington.
Venezuela convocó a la cita del ALBA para llevar a Puerto España una posición común ante la ausencia de Cuba en la cumbre continental, así como exigir el levantamiento del embargo norteamericano a la isla. (AFP)








