10 Abril 2009
LIMPIEZA. Los agentes sociosanitarios, que son bienvenidos, le enseñan a la gente medidas de higiene. LA GACETA / ANALIA JARAMILLO
En los barrios de las afueras de la capital, los chicos lo llaman "el señor del dengue". Cada agente social, por prevención, se rocía el cuerpo con repelente antes de ingresar en los fondos de las casas donde se acumulan los cacharros que tanto le gustan al mosquito Aedes Aegypti, transmisor del virus del dengue. En Tucumán hay 850 agentes sociosanitarios cuyo accionar es fundamental para prevenir la expansión de la epidemia.
Para los chicos del barrio, los agentes sanitarios son una especie de héroes que van a rescatarlos del malvado dengue, según cuenta Ariel Pedraza. Apenas los ven llegar, empiezan a gritar: "ahí viene el señor del dengue. El nos va a salvar". Los agentes hacen su trabajo casa por casa. Explican cuáles son los síntomas de la enfermedad, cómo se previene y los riesgos que se corren si se habita cerca de una vivienda donde se reportó un caso.
Para los chicos del barrio, los agentes sanitarios son una especie de héroes que van a rescatarlos del malvado dengue, según cuenta Ariel Pedraza. Apenas los ven llegar, empiezan a gritar: "ahí viene el señor del dengue. El nos va a salvar". Los agentes hacen su trabajo casa por casa. Explican cuáles son los síntomas de la enfermedad, cómo se previene y los riesgos que se corren si se habita cerca de una vivienda donde se reportó un caso.
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