
River alcanzó la punta con el "Ogro" Fabbiani en cancha
Con un polémico gol de Abelairas y otro tanto de Falcao, derrotó al "taladro" por 2 a 0. Con este triunfo, los "millonarios" se ubican primeros junto con Newell´s, Godoy Cruz y Colón. El ex jugador de Newell´s ingresó en el complemento y Víctor López vió la roja en el "taladro".
OGROMANIA. Shrek y Fiona fueron al Monumental para ver jugar al "Ogro" Fabbiani. DYN

BUENOS AIRES.- River Plate recuperó esta noche la memoria y tras vencer a Banfield 2-0 en el Monumental llegó a la cima del torneo Clausura, la que comparte con Newell?s Old Boys, Colón de Santa Fe y Godoy Cruz.
El primer gol lo marcó el mediocampista Matías Abelairas, de tiro libre, a los 36 minutos de la etapa inicial. Esa conquista fue muy protestada por todo Banfield, ya que el árbitro Juan Pablo Pompei había levantado una mano, por lo que se interpretó que la ejecución debía ser indirecta.

River contó con su nuevo ídolo, Cristian Fabbiani, durante la última media hora de juego, pero en todo momento Banfield fue un rival exigente.
De todos modos, a 7 minutos del desenlace del cotejo el Ogro cubrió la pelota con su voluminoso cuerpo y giró antes de habilitar al colombiano Radamel Falcao García, quien con un toque esquinado aseguró los tres puntos y el regreso de River a un lugar más acorde con lo establecido por su rica historia.

El equipo de Néstor Gorosito sigue invicto, porque debutó con un empate ante Colón, en el Monumental, y luego obtuvo una victoria ante Rosario Central, en el Gigante de Arroyito.
La campaña del conjunto de Jorge Burruchaga también tiene sus méritos, a tal extremo que había comenzado este tercer capítulo de la competencia doméstica con chance de acceder al tope de las posiciones.
Y en el campo de juego se comprobó que el Taladro era un probador exigente, ya que al principio tanto Facundo Ferreyra como Sebastián Fernández estuvieron cerca de abrir el marcador.
Además, Nicolás Bertolo antes y después del acierto de Abelairas fue un factor de permanente preocupación para la retaguardia millonaria.
Pero esa formación albiverde que tenía inquietos a los de la banda roja fue víctima de un tiro libre en el que Pompei resultó desorientador y Abelairas preciso, exquisito, decisivo.
El remate del Pitu pasó limpito por encima de la nutrida barrera y Cristian Lucchetti recién se movió para encabezar un reclamo masivo cuando el balón ya había aterrizado en el interior de la red.
La falla de Pompei estuvo en el gesto previo al disparo, porque empleó un brazo de tal forma que provocó la confusión.
En la segunda parte la alineación sureña se lanzó en procura de la igualdad y esta vez sí Juan Marcelo Ojeda transmitió seguridad, tal como ocurría cuando era el guardavalla de Rosario Central.
Claro que para River la solución definitiva la aportó la dupla ofensiva naciente, la que conforman el colombiano que creció en la casa y el recién llegado Fabbiani, tan gordo, como mediático y efectivo. (DyN)







