MATAMOROS, México.- Una cantante mexicana fue asesinada ayer en un hospital ubicado al norte de México, donde se recuperaba de un ataque previo en el que había sido baleada. Zayda Peña Arjona, de 28 años, fue ultimada de un disparo al corazón por un grupo de hombres armados que había ingresado a su habitación.
La muerte de la vocalista muestra hasta dónde llega la impunidad de los grupos criminales mexicanos. Se trata del cuarto caso que se produce en un año, en el que los sicarios han matado o atacado a intérpretes musicales cuyas canciones hablan del tráfico de drogas o de violencia en la región.
La joven vivía en la ciudad de Matamoros, en el Estado de Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos. Ese territorio está dominado por el llamado cartel del Golfo, una de las dos principales bandas de narcotraficantes que operan en México. (Especial)