Afirman que la psicosis puede aparecer "de un día para otro y de la peor forma"

Afirman que la psicosis puede aparecer "de un día para otro y de la peor forma"

Expertas dicen que generalmente la patología no muestra antecedentes. El crimen paranoico se estudia desde 1933, cuando dos criadas mataron a sus patronas en Francia. Sin motivos, les arrancaron los ojos y las acuchillaron.

30 Octubre 2007
El crimen que cometió Pablo Amín puede haber sido el debut de una psicosis, según la opinión de especialistas en salud mental, quienes descartaron que el hecho pueda encuadrarse en un estado de emoción violenta, ya que en estos casos no hay ensañamiento.
La psiquiatra Inés Cabrera comentó que ciertas sustancias, como la cocaína o las anfetaminas, pueden desatar un brote psicótico desde una estructura psíquica que no está bien conformada. Explicó que la psicosis es una enfermedad imprevisible: "generalmente no muestra antecedentes. Puede aparecer de un día para otro y de la peor forma, con un suicidio o un homicidio, por ejemplo".
"La psicosis es un trastorno de la personalidad que se caracteriza por la desorganización, el delirio, la alucinación y la alteración del juicio de la realidad, entre otros síntomas. La persona, por ejemplo, puede alucinar una voz que le dice que matando a alguien salva el mundo, y entonces comete un crimen", resaltó. En estos casos, según Cabrera, se realizan juntas médicas que, luego de analizar largamente al acusado, definen si este es imputable o no. "En general, los casos de psicosis son inimputables, porque la persona no tiene conciencia de que lo que hizo está mal", comentó.
La doctora en Psicoanálisis, Marta Gerez no cree que el caso de Amín se trate de una esquizofrenia, ya que quienes padecen esta enfermedad tienen comportamientos extraños durante muchos años. En cambio, sí considera probable que el agresor padezca una psicosis paranoica. "La persona tiene la sensación de que la persiguen, de que quieren matarla, y reacciona haciendo daño. La modificación de la personalidad se produce en el instante, y el sujeto no es dueño de sus actos; no puede reconocerles criminalidad", recalcó.

No parece pasional
Gerez también descartó que el joven agresor haya sufrido un ataque de pánico y que sea un crimen pasional. "Alguien que arranca los ojos, que se ensaña tanto con un cuerpo, es una persona que siente que corre un peligro terrible", destacó.
La experta sostuvo que para establecer si un acusado sufre este tipo de patología, lo que podría significar que es inimputable, se hacen muchas evaluaciones. "Lo importante es que la persona pueda tratarse y mejorar, para lo cual es fundamental que se declare culpable y que pueda reconocer y reconstruir lo que hizo. Sin embargo, los abogados defensores optan por pedir la inimputabilidad", concluyó.