La Guerra de Malvinas dejó 649 soldados argentinos muertos y más de un millar de heridos. El 14 de junio de 1982, a dos meses y medio de la toma de las islas, las fuerzas argentinas depusieron sus armas luego de que se quebraron las últimas líneas defensivas de la infantería, que se replegó en medio del desorden. La derrota generó una profunda desazón entre quienes estuvieron en el combate y marcó un punto de inflexión en la historia nacional.
A 25 años de la capitulación, tres tucumanos que estuvieron en el conflicto del Atlántico Sur, dos ex combatientes y un civil, recuerdan con dolor aquella decisión acordada entre los generales Jeremy Moore (comandante inglés) y Mario Benjamín Menéndez (argentino, gobernador militar de las islas), y afirman que la lucha continuará hasta que se vea flamear nuevamente la bandera argentina sobre el archipiélago.