09 Octubre 2002 Seguir en 
NUEVA YORK.-La popular cantante Madonna y su esposo, el director de cine Guy Ritchie estremecieron a Estados Unidos la semana pasada.
Con una entrevista salida de lo normal y muy satírica, en un especial de TV del canal MTV sobre la más reciente película de Ritchie, "Swept Away", la historia de una mujer de sociedad, altanera y despectiva, que naufraga en una isla del Mediterráneo en compañía de un marinero comunista, hicieron gala de su sentido del humor.
Los aficionados al cine que sintonizaron el documental sobre el detrás de cámaras del filme de la pareja, fueron sorprendidos por una divertida entrevista que se hicieron entre ellos, escenificando una conversación ridícula de una familia muy ingenua e inspirada en un video casero de sus hijos Rocco y Lourdes.
La cantante abrió la peculiar entrevista preguntándole a su esposo por qué la había contratado para la película en vez de Julia Roberts. A esto Richie respondió en broma: "De hecho, se lo pregunté y ella dijo no" y continuando con el tono jocoso agregó que su esposa no había sido siquiera la segunda opción, "pero estaba disponible, era más barata y además era mi esposa".
Madonna utilizó el programa para destacar el severo desorden alimenticio de su esposo, explicando que "nunca puede parar de comer y llega a devorar todo lo que tiene en frente, incluso mi almuerzo" mientras se presentaban imágenes del detrás de cámaras en las que Ritchie comía tortas, pasabocas y sandwiches.
La artista no se cansó de tomarle el pelo e incluso le preguntó acerca de las escenas en las que ella tiene que retozar ligera de ropas con el actor Adriano Giannini enfrente de él. Después le preguntó de nuevo si llegó a estar celoso y admitió que le hubiera gustado que él le preguntara si le gustaría que ella fuera celosa. Madonna terminó la charla abofeteando a su esposo. (Especial_
Con una entrevista salida de lo normal y muy satírica, en un especial de TV del canal MTV sobre la más reciente película de Ritchie, "Swept Away", la historia de una mujer de sociedad, altanera y despectiva, que naufraga en una isla del Mediterráneo en compañía de un marinero comunista, hicieron gala de su sentido del humor.
Los aficionados al cine que sintonizaron el documental sobre el detrás de cámaras del filme de la pareja, fueron sorprendidos por una divertida entrevista que se hicieron entre ellos, escenificando una conversación ridícula de una familia muy ingenua e inspirada en un video casero de sus hijos Rocco y Lourdes.
La cantante abrió la peculiar entrevista preguntándole a su esposo por qué la había contratado para la película en vez de Julia Roberts. A esto Richie respondió en broma: "De hecho, se lo pregunté y ella dijo no" y continuando con el tono jocoso agregó que su esposa no había sido siquiera la segunda opción, "pero estaba disponible, era más barata y además era mi esposa".
Madonna utilizó el programa para destacar el severo desorden alimenticio de su esposo, explicando que "nunca puede parar de comer y llega a devorar todo lo que tiene en frente, incluso mi almuerzo" mientras se presentaban imágenes del detrás de cámaras en las que Ritchie comía tortas, pasabocas y sandwiches.
La artista no se cansó de tomarle el pelo e incluso le preguntó acerca de las escenas en las que ella tiene que retozar ligera de ropas con el actor Adriano Giannini enfrente de él. Después le preguntó de nuevo si llegó a estar celoso y admitió que le hubiera gustado que él le preguntara si le gustaría que ella fuera celosa. Madonna terminó la charla abofeteando a su esposo. (Especial_
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