Las aventuras de un conde que escandalizó a su época

En todas las generaciones se destaca una persona tan escandalosa, tan rebelde, tan propensa a romper con los tabúes de la época, que logra revolucionar el mundo de las ideas y convertirse en un espíritu realmente libre y liberador. En el siglo XVII esa persona fue, indudablemente, John Wilmot, Conde de Rochester.
Ahora, en el filme de Laurence Dunmore, Johnny Depp (dos veces nominado al Oscar por la Academia de Hollywood) encarna las atrevidas e irreverentes aventuras de un hombre que rompió todas las reglas de su época. Con gran realismo y osadía, la película brinda un panorama de la vida en Londres en los años 1660.
Situada en la época de la Restauración -un período en el que el rápido desarrollo científico, religioso y artístico, así como una creciente sensación de libertad, crearon el principio del mundo moderno-, "El libertino" sigue los pasos del meteórico ascenso y caída del conde. Confidente cercano del rey Carlos II, interpretado por John Malkovich (también dos veces nominado al Oscar), el conde deleita a la realeza inglesa con su ingenio subversivo y escandaliza a la sociedad londinense con sus escándalos sexuales. Pero cuando se enamora de Elizabeth Barry (Samantha Morton), su romance y traición serán para el conde un salto desde lo más alto de la celebridad social hacia las profundidades de la ruina, en lo que parece la búsqueda de una redención final.
Viviendo el presente como si no hubiera un mañana y bordeando siempre los extremos, la fascinante vida de John Wilmot comenzó en 1647. Hijo del primer conde de Rochester, en una Inglaterra que estaba emergiendo de la Edad Media, el joven vio nacer un nuevo tiempo y una nueva moral. Demostrando una precoz inteligencia, Rochester acudió a Oxford a los 12 años. Luego de convertirse en un joven héroe tras demostrar su coraje en varias batallas, se hizo de una reputación que recorrió Europa gracias a su personalidad nada convencional. Además de sus poemas sexualmente explícitos y sus obras satíricas que asombraron al público de la época, él supo convertirse en un referente literario que fue más tarde admirado por Defoe y citado por Tennyson. También sirvió de inspiración a Voltaire. Su fama se hizo realmente notable cuando se unió a la corte del rey Carlos II. Pero incluso en la impúdica atmósfera de esta corte, Rochester se destacó como un caso aparte. "Hacer esta película fue un gran desafío, porque el personaje es muy distinto a mi", comentó Depp que, de esta manera, estará presente por partida doble en la cartelera local. Su otra película es la exitosa "Piratas del Caribe: el cofre de la muerte".