23 Febrero 2006
La magia y maravilla de uno de los filmes animados de todos los tiempos más atesorados y aclamados por la crítica vuelve a cobrar vida en la pantalla en “Bambi 2 El gran príncipe del bosque”, de Walt Disney Pictures. Creado meticulosamente a lo largo de cuatro años por los Estudios DisneyToon para captar la belleza, emoción, calidez y humor del clásico animado de 1942, esta película señala el retorno, luego de más de 60 años, de los amados personajes Bambi, Tambor, Flor, Faline y Amigo Búho. Estos inolvidables habitantes del bosque se unen a algunos nuevos amigos muy especiales, quienes aportan diversión y aventura a esta atemporal historia.
La nueva versión de Bambi narra la historia del crecimiento del joven cervatillo príncipe en la época posterior a la pérdida de su madre, cuando aprende que su padre es el reverenciado Gran Príncipe del Bosque.
Con un inspirador mensaje de coraje, esperanza y renovación, el filme se centra en la relación en principio difícil entre el juguetón cervatillo y su rey padre. Ambos emprenden un camino para sobreponerse a la pena y encontrar en el otro algo maravilloso e inesperado: una familia. A medida que Bambi y su padre pasan más tiempo juntos, la brecha entre ambos comienza a estrecharse. Bambi demuestra los reflejos del coraje y de la habilidad física que algún día poseerá, mientras que el exterior áspero del Príncipe se suaviza a medida que recuerda su propia juventud y el simple goce del juego.
La nueva versión de Bambi narra la historia del crecimiento del joven cervatillo príncipe en la época posterior a la pérdida de su madre, cuando aprende que su padre es el reverenciado Gran Príncipe del Bosque.
Con un inspirador mensaje de coraje, esperanza y renovación, el filme se centra en la relación en principio difícil entre el juguetón cervatillo y su rey padre. Ambos emprenden un camino para sobreponerse a la pena y encontrar en el otro algo maravilloso e inesperado: una familia. A medida que Bambi y su padre pasan más tiempo juntos, la brecha entre ambos comienza a estrecharse. Bambi demuestra los reflejos del coraje y de la habilidad física que algún día poseerá, mientras que el exterior áspero del Príncipe se suaviza a medida que recuerda su propia juventud y el simple goce del juego.







