La grandeza de Hugo Conte no se limita a los genes que le dieron su tamaño ni al nivel de juego que lo llevó a ser considerado entre los ocho mejores de todos los tiempos.
Conte es grande, también, porque dice las cosas como las siente. El fin de semana volvió a Tucumán con su actual club, Amigos, y venció al nuevo Social. El último campeón, que jugó bajo el nombre de Swiss Medical y que se desprendió de sus figuras. Entre ellas, el propio Hugo y el DT Waldo Kantor.
"No continuar jugando en Tucumán fue algo inesperado.
Trabajamos muchas horas y pasamos muchas noches desvelados junto a Waldo para buscarle una continuidad a la plaza, una vez que Swiss Medical se retiró del voley. Es más, Waldo se quedó sin dirigir en la Liga porque desechó una oferta de París y otra de Almería. Creíamos que íbamos a seguir con Social", asegura el jugador universal y pieza clave del título en abril pasado.
Ahora, el regreso al estadio de Caja Popular le provocó tristeza a Conte. "Me duele ver Caja con poca gente. Estoy triste por Social. Swiss Medical es una empresa y tomó la decisión como una empresa. Esperábamos que lo que logramos no haya sido una burbuja y continúe, pero no conseguimos apoyo del Gobierno tucumano ni de los empresarios. Es una lástima", lamentó el hombre de 42 años, cinco más que, por ejemplo, el "Chino" Benavídez, el flamante entrenador de Monteros.
"A estos chicos de Social sólo les puedo decir que sigan para adelante; los vi con un hambre de gloria tremendo y dejaron en claro que van a pelear cada punto como si fuera el último. Ojalá que les vaya lo mejor posible", anheló Conte, el grande.
El central Oscar Sarmiento se resintió de una contractura en la zona abdominal. Así, "Quique" seguirá en el banco el domingo a las 20.30, cuando Social visite, en Posadas, a Misiones Voley.