Buenos Aires. - Cinco grupos del movimiento fundamentalista Jamaat Tabligh, vinculado con la organización Al-Qaeda, ingresaron a la Argentina en los últimos siete meses con el posible objetivo de contactar y reclutar a ciudadanos argentinos de la comunidad musulmana para ser entrenados en el exterior en actividades terroristas, según publicó hoy un matutino porteño.
El ingreso de los grupos, compuestos en total por 26 personas, fue detectado por los servicios de inteligencia argentinos, que habían sido previamente alertados, entre otros, por sus pares de España y de Italia, según se señaló.
El origen de los 26 miembros de Jamaat Tabligh era Paquistán, Malasia y Sudáfrica, además de Qatar y Egipto.
De acuerdo con lo señalado, los "fundamentalistas islámicos habrían operado durante los primeros meses de este año en Bahía Blanca, Laprida, Balcarce, Salta y Córdoba", en tanto que algunos fueron detectados en algún momento en la Capital Federal, La Plata y El Bolsón.
Las autoridades argentinas vigilaron de cerca a los extranjeros: el 22 de julio último siete ciudadanos con pasaportes de Qatar y dos con pasaportes egipcios fueron demorados en las localidades bonaerenses de Balcarce y de Laprida.
Cinco días más tarde fueron arrestados por unas horas en Córdoba cuatro ciudadanos malayos pertenecientes al movimiento Jamaat Tabligh.
Esos dos episodios habían tenido amplia difusión en los medios periodísticos en el momento en que se produjeron. El objetivo en ningún momento fue mantenerlos arrestados, pues no habían violado la ley, pero sí hacerles sentir que el Estado "los vigilaba", indicaron las versiones periodísticas.
Según se indicó, expertos antiterroristas españoles dieron al Gobierno varias precisiones sobre este movimiento; por ejemplo, que el mismo fue y sigue siendo investigado por la participación de algunos de sus miembros en los atentados en Madrid, en la terminal ferroviaria de Atocha el 11 de marzo de 2004, que causaron 192 muertos.
Un alerta sobre la presencia de los integrantes de ese grupo en la Argentina la recibió la Secretaría de Culto de los propios dirigentes de la comunidad musulmana local.
Las autoridades especulan con que los integrantes del grupo islámico no buscarían realizar atentados en la Argentina, sino reclutar adeptos para las filas de Al-Qaeda.
El objetivo habría sido relacionarse con ciudadanos argentinos musulmanes de segunda o de tercera generación en el país para captar a aquellos que tengan ideas más afines a las posiciones extremistas y derivarlos, en una segunda etapa, a campos de entrenamiento en el exterior.
La presencia de algunos de los miembros de Jamaat Tabligh en las inmediaciones de Mar del Plata despertó mayores sospechas de las autoridades, en momentos en que se organiza la Cumbre de las Américas, prevista para noviembre próximo. (NA).