
Créditos hipotecarios UVA: cuánto hay que ganar para acceder en diciembre de 2025

El regreso de los créditos hipotecarios UVA a fines de 2024 volvió a poner sobre la mesa una aspiración histórica de los argentinos: acceder a la vivienda propia. Sin embargo, lejos de significar una apertura masiva, estas líneas de financiamiento se consolidaron como un producto selectivo, condicionado por tasas elevadas, requisitos estrictos y un contexto económico que no da tregua. De cara a diciembre de 2025, la pregunta central sigue siendo la misma: ¿cuánto hay que ganar para que un banco apruebe un crédito hipotecario?
El primer obstáculo aparece incluso antes de analizar los ingresos. La suba del dólar encareció el valor de las propiedades medidas en pesos, elevando el monto de los préstamos necesarios. Un inmueble que meses atrás parecía accesible hoy exige un endeudamiento mayor, lo que se traduce en cuotas iniciales más altas. A ese escenario se sumó el incremento de las tasas de interés y una revisión más dura de los perfiles crediticios por parte de las entidades financieras.
En los últimos meses, varios bancos llevaron su tasa nominal anual a niveles de hasta el 17%, el registro más alto desde el regreso de estos créditos. Otros, como el Banco Nación, optaron por sostener tasas considerablemente más bajas, cercanas al 6%, pero endurecieron al máximo los criterios de aprobación. En la práctica, esto implica exigir historiales financieros casi perfectos, con ingresos estables, bajo nivel de endeudamiento y excelente comportamiento crediticio.
Especialistas del sector advierten que este aumento del “scoring” funciona como un freno silencioso al otorgamiento de créditos. Sin modificar formalmente las tasas, los bancos reducen la cantidad de préstamos aprobados en un sistema financiero que enfrenta falta de fondeo para operaciones de largo plazo, elevada incertidumbre macroeconómica y un riesgo país que sigue siendo alto.
Más allá de las particularidades de cada entidad, existe una regla común que define el acceso a los créditos UVA: la cuota inicial no puede superar el 25% de los ingresos del solicitante o del grupo familiar. Este límite busca reducir el riesgo de incumplimiento, pero al mismo tiempo deja afuera a miles de personas que, aun cumpliendo con el ingreso mínimo exigido, no logran una relación cuota-sueldo aceptable.
Los ingresos requeridos para diciembre de 2025
En ese marco, los ingresos requeridos para diciembre de 2025 muestran fuertes diferencias entre bancos. Credicoop fija un piso superior a los $3.000.000 mensuales. Banco del Sol establece un mínimo de $1.000.000, mientras que ICBC eleva ese umbral a $1.100.000. BBVA exige ingresos equivalentes a cuatro salarios mínimos, vitales y móviles —unos $1.288.800—, aunque para acceder a su tasa preferencial del 8% el ingreso requerido asciende a $5.000.000. En el caso de Santander, el mínimo es de $1.540.000 para vivienda permanente y de $1.700.000 para no permanente. Supervielle, en tanto, se posiciona entre los más exigentes, con ingresos superiores a los $5.000.000.







