
Tres técnicas infalibles para evitar que espíen tu celular.

En los últimos meses se registró un fuerte incremento de consultas relacionadas con aplicaciones espía -conocidas como stalkerware-, programas que se hacen pasar por herramientas de control parental o de rastreo, pero permiten que terceros accedan sin autorización a fotos, mensajes, llamadas y ubicación.
Estas apps suelen instalarse por fuera de las tiendas oficiales y aprovechan permisos avanzados para ocultarse dentro del sistema.
Cómo detectar si tu teléfono está siendo espiado
Algunas señales pueden evidenciar la presencia de software espía: un rendimiento más lento de lo habitual, sobrecalentamiento sin motivo, picos en el consumo de datos o funciones que se activan sin intervención del usuario. Estos cambios justifican una inspección detallada del equipo.
Identificar un posible espionaje no es cuestión de intuición. Existen métodos concretos que permiten reconocer comportamientos sospechosos y tomar medidas para resguardar la información personal.
Las tres técnicas más efectivas para proteger tu celular:
1. Revisar cambios en el rendimiento del dispositivo: un celular que se calienta sin razón, que gasta la batería más rápido que lo habitual o que muestra un consumo de datos inusualmente alto podría estar ejecutando procesos ocultos vinculados a aplicaciones de espionaje.
2. Usar herramientas profesionales de ciberseguridad: las aplicaciones antivirus y de seguridad confiables pueden realizar escaneos profundos que detectan stalkerware, incluso cuando estas apps intentan camuflarse. Los especialistas recomiendan reforzar el acceso al dispositivo mediante contraseñas robustas o métodos biométricos y activar la autenticación en dos pasos siempre que sea posible.
3. Restaurar el teléfono a su estado de fábrica: si se confirma la sospecha, es esencial eliminar el software espía de inmediato. Restaurar el dispositivo borra cualquier aplicación persistente que se haya instalado sin permiso. Antes, se sugiere hacer una copia de seguridad únicamente de archivos personales como fotos y videos. Luego del formateo, se deben cambiar todas las contraseñas de correos, redes sociales, servicios bancarios y cualquier otra cuenta vinculada.







