Luis Caputo, ministro de Economía de la Nación.
El Gobierno argentino enviará este viernes una misión a Washington encabezada por el ministro de Economía, Luis Caputo, para sostener conversaciones con Scott Bessent sobre opciones de financiamiento internacional y la posibilidad de una asistencia financiera para el país.
La delegación estará integrada además por el segundo del Ministerio, José Luis Daza; el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el titular del Banco Central, Santiago Bausili. Según confirmaron voceros oficiales al portal Infobae, la agenda de reuniones comenzará este fin de semana y podría extenderse al inicio de la próxima semana. “La agenda se irá informando a medida que se vayan concretando las reuniones”, señalaron desde el Palacio de Hacienda.
La reunión había sido anticipada por el propio Bessent, quien confirmó un encuentro directo con Caputo y su equipo en la capital estadounidense. Allí se discutirán alternativas vinculadas a un eventual apoyo financiero, aunque en un contexto complejo: Washington se encuentra virtualmente “cerrada” por el conflicto político entre republicanos y demócratas en torno al shutdown del gobierno federal.
En declaraciones a la cadena CNBC, Bessent acusó a los demócratas de “negociar como terroristas” al resistirse a los planes de la administración Trump, que busca recortar gastos federales y eliminar el programa de salud Obamacare. En este marco, algunos legisladores demócratas objetan brindar asistencia a un país como Argentina mientras se ejecutan recortes internos de gran magnitud.
El tema tomó mayor notoriedad tras un tuit de Bessent, quien señaló que la visita de Javier Milei a la Casa Blanca el próximo 14 de octubre, donde se reunirá con Donald Trump, será clave para profundizar las conversaciones sobre apoyo financiero. Sin embargo, poco después aclaró en televisión que el respaldo a la Argentina tendría límites: “No estamos poniendo dinero en la Argentina, le estamos dando una línea de swap”.
El funcionario norteamericano explicó que la asistencia se basaría en la activación de un canje de monedas y no en un desembolso de fondos. “Sólo para dejarlo claro: le estamos otorgando una línea de swap. No estamos poniendo dinero en la Argentina”, enfatizó.
Las declaraciones generaron impacto en el mercado local, que vivió una jornada de alta volatilidad. Las acciones y bonos reaccionaron en un vaivén constante: primero subieron con el anuncio del viaje, luego bajaron tras las declaraciones televisivas de Bessent y volvieron a repuntar alrededor de las 14:30, con un alza promedio del 2% en los bonos soberanos. El riesgo país, medido por JP Morgan, se ubicó en torno a los 1.264 puntos básicos.
Con expectativas altas pero también incertidumbre, la misión encabezada por Caputo buscará definiciones que contribuyan a fortalecer el esquema financiero argentino y otorgar mayor previsibilidad en medio de un escenario internacional y local marcado por la inestabilidad.







