EXPERIMENTADA. Lourdes Solórzano será una de las protagonistas de la competencia principal del certamen de Tapia.
El ruido de los cascos golpeando la pista de arena, el brillo de las monturas y la elegancia de amazonas y jinetes volverán a ponerlo color a Tapia. Este fin de semana, La Liofila Polo Jumping será el epicentro de la segunda edición del torneo hípico que promete dos jornadas intensas de competencia, espectáculo y tradición ecuestre. El predio, ubicado en el kilómetro 4,5 de la ruta 341, abrirá sus puertas el sábado y el domingo desde las 9 de la mañana, con un programa que se extenderá hasta entrada la noche, combinando deporte, homenajes, concursos y música.
La convocatoria tiene un carácter interprovincial: llegarán participantes de Salta, Santiago del Estero, Córdoba y de varios clubes tucumanos, en una clara muestra del crecimiento que viene experimentando la disciplina en la región. No será solo un torneo, sino una verdadera fiesta del hipismo, donde se entrelazan la adrenalina del salto con el espíritu familiar que caracteriza a este tipo de certámenes.
En lo estrictamente deportivo, las pruebas estarán abiertas para todas las categorías, con alturas que irán desde los 0,50 hasta 1,30 metros. Esa amplitud de niveles permitirá que tanto jóvenes promesas como jinetes experimentados tengan su espacio en la pista. Entre los nombres destacados figuran el cordobés Lautaro Franchi, los salteños Nahuel y Tobías Salim, y los locales Matías Saravia, Vanina Paoletti y Lourdes Solórzano, quienes aportarán jerarquía y competitividad al certamen.
La cita también contará con un condimento especial: la “prueba para audaces”, programada para el sábado, luego de la competencia principal. Según explicaron los organizadores, se trata de una competencia lúdica con un premio importante para el ganador, pensada para aquellos que nunca participaron en un concurso oficial. “Es un desafío para los intrépidos que se animen a vivir la experiencia de saltar. Queremos revivir las divertidas pruebas que organizaba el desaparecido Club Hípico Tucumán y que todos puedan sentirse parte del evento”, destacó Lourdes Cossio, amazona y organizadora.
Un homenaje al pasado
El torneo también tendrá un espacio para la memoria y el reconocimiento. Durante el fin de semana se rendirá homenaje a los socios fundadores del histórico Club Hípico Tucumán, que durante décadas funcionó en el parque 9 de Julio y dejó una huella imborrable en la vida deportiva y social de la provincia. Enrique J. Paz, Luis Alberto Ugo, Rodolfo Paz, Héctor Rodríguez, Matilde Ferro y Silvia de Pujol serán algunos de los distinguidos, en un gesto que busca tender un puente entre las raíces de la disciplina y su presente pujante.
Mucho más que un torneo
La propuesta no se limitará a la pista. Habrá música en vivo de la mano del DJ Maldo, un concurso de karaoke y varias sorpresas destinadas a que el público se sienta protagonista. La idea, según remarcan desde la organización, es que el hipismo sea el centro, pero que el espectáculo se viva como una experiencia integral para toda la familia.
Al caer la tarde, cuando los últimos saltos resuenen en el silencio de Tapia y la música empiece a copar el ambiente, quedará claro que el torneo de La Liofila no es solo un certamen deportivo: es un encuentro donde conviven la pasión por los caballos, la camaradería de los clubes y la emoción de una disciplina que, en Tucumán, sigue creciendo.






