01 Octubre 2025


Insólita y muy injusta la crítica que el lector Guardia Bosñac (carta del 28/09) hace a las alianzas de la UCR con el PRO y otros partidos políticos, oponiéndose a los candidatos del colectivo peronista (Alberto Fernández, Sergio Masa, etc.). Seguramente sabe el lector que el Partido Justicialista, en su dilatada historia, cuando ha ejercido el poder, ha tomado medidas económicas consideradas ortodoxas (o liberales), amigables con el mercado, es decir, hicieron ajustes. Lo hizo el general Perón, cuando en su segundo gobierno se quedó sin recursos debido al despilfarro anterior: eliminó subsidios y gastos del Estado; tomó créditos del exterior; otorgó concesiones petroleras a empresas norteamericanas; ¡prohibió las huelgas!; estableció topes máximos para aumentos salariales; dictó una nueva ley de inversiones extranjeras y hasta obligó a la población a comer pan negro para facilitar las exportaciones de harinas y trigos. La administración del presidente Menem, con el explícito apoyo de Néstor y Cristina Kirchner (decían que era el mejor presidente de la historia) también tomó medidas de ajuste de tipo liberal que fueron muy exitosas. De manera que no hay que sorprenderse y sobre todo no corresponde acusar a la UCR por sus alianzas alejadas del colectivo peronista, debe ser muy difícil para dirigentes radicales, que nunca estuvieron condenados por hechos de corrupción, establecer una alianza con un partido con decenas de dirigentes encarcelados y con su presidente con una tobillera electrónica.

Luis Ovidio Pérez Cleip                       

luisperezcleip@gmail.com

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios