Cuáles son los lugares soñados por alumnos destacados de Arquitectura de la UNT
Con proyectos que combinan innovación, cultura y sostenibilidad, nueve estudiantes tucumanos fueron seleccionados en los Inspireli Awards entre más de 1.500 candidatos de 77 países. En 2026, la FAU será sede del certamen por primera vez.
REPRESENTANTES ARGENTINOS. Los estudiantes y arquitectos que resultaron finalistas de los Inspireli Awards son Belisario Terán, Valentina Ríos Jaimes, Scott Wilde, Lucas Saavedra, Sofía Grinblat, Jerónimo Madariaga, Matías Ezequiel Bazán Valladares, Amelia Muro y Miguel Ángel Leguizamón. / FAU
Nueve estudiantes y recién egresados de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán (FAU-UNT) se destacaron entre 1.511 candidatos de 77 países y son finalistas de los Inspireli Awards. Se trata del concurso estudiantil de arquitectura más grande del mundo. Con entre 25 y 27 años, estos jóvenes arquitectos no sólo diseñan espacios, sino que también buscan que sus propuestas impacten social, económica y culturalmente.
Estos jóvenes asistieron al Taller Combes, uno de los más populares de la FAU, donde aprendieron a tener grandes aspiraciones creativas. Los ganadores se anunciarán el 6 de octubre de 2025, pero, para estos nueve estudiantes, el haber llegado a la instancia final ya es un premio. Año a año, los postulantes de la provincia reivindican el potencial de su talento en este certamen nacido en 2015, en República Checa, en el seno de una organización cofundada por el ex presidente Václav Havel; el arquitecto y artista Bořek Šípek, y el académico y arquitecto Karel Smejkal, el único de los tres que permanece con vida.
A continuación se detallan los proyectos presentados por los estudiantes tucumanos destacados. Se trata de ideas que representan sueños de cultura, prosperidad e innovación.
Centro de Observación Astronómica Ñawi
Belisario Terán y Lucas Saavedra, ambos de 25 años, junto con Valentina Ríos Jaimes y Scott Wilde, de 26, presentaron el proyecto “Centro de Observación Astronómica Ñawi”. La propuesta surgió con un objetivo claro: potenciar el turismo en los Valles Calchaquíes, y transformar la ruta que va de Tafí del Valle a Cafayate en un recorrido más atractivo y completo para visitantes nacionales e internacionales.
Valentina contó en diálogo con LA GACETA que la idea se enfocó en fortalecer el observatorio ya existente y agregarle funciones que enriquecieran la experiencia: "nos juntamos con quienes gestionan el observatorio y escuchamos qué necesitaban. Así pudimos agregar desde un restaurante y bar hasta un hotel con spa, museos y un auditorio para el turismo científico. Queríamos que fuera un espacio donde toda la gente quisiera ir a conocer y aprender".
EN DOS CATEGORÍAS. el grupo compuesto por Belisario Terán, Valentina Ríos Jaimes, Scott Wilde y Lucas Saavedra resultó finalista con el proyecto “Centro de Observación Astronómica Ñawi”. / CORTESÍA VALENTINA RIOS
Más allá de lo arquitectónico, la motivación era contribuir al crecimiento de la provincia. "Vivimos acá, y ver cómo nuestra provincia tiene tantas oportunidades nos motivó a crear algo útil, que impacte socialmente y que también permita que otros conozcan la riqueza de Tucumán", agregó.
Para ellos el proyecto fue un trabajo de casi un año, desde abril-mayo de 2024 hasta mayo de 2025, mientras cursaban sus exámenes finales: se trata de la tesis con la que se recibieron este año. Ese trabajo representa una primera gran experiencia profesional que refleja su pasión por transformar la provincia desde la arquitectura.
CENTRO ASTRONÓMICO. El proyecto “surge de la necesidad de mejorar el atractivo turístico de la provincia de Tucumán, Argentina, con especial énfasis en el circuito turístico de los Valles Calchaquíes”. / CORTESÍA VALENTINA RIOS
Devolver el parque a la ciudad
Sofía Grinblat (26) y Jerónimo Madariaga (27) presentaron “Devolver el parque a la ciudad”, un proyecto que busca recuperar una zona urbana degradada, y convertirla en un espacio público inclusivo y sostenible. La inspiración, explicaron, vino de observar cómo las personas necesitan lugares para caminar, sentarse bajo un árbol, juntarse con amigos o hacer deporte al aire libre.
Contaron que al ver un área grande de la ciudad desaprovechada, aislada por las vías del tren, decidieron resignificarla. "Queríamos abrirla a la comunidad y convertirla en un nuevo lugar de encuentro, que integrara cultura, deporte, gastronomía y verde, y que los tucumanos puedan apropiarse del espacio", detallaron.
EN LA CATEGORÍA ''ARQUITECTURA''. son finalistas Sofía Grinblat y Jerónimo Madariaga con el proyecto “Devolver el parque a la ciudad”. / CORTESÍA JERÓNIMO MADARIAGA
Para ellos la arquitectura no puede pensarse de manera aislada, sino que lo social y lo ambiental van de la mano. "Es una forma de reconciliar a la ciudad con sus habitantes y generar identidad y pertenencia en cada espacio”, dicen.
Y finalizaron con la reflexión: “que proyectos tucumanos lleguen a competir en un premio mundial es un orgullo y nos demuestra que desde acá también se pueden generar ideas con impacto afuera. Además, es lindo pensar que a través de un proyecto como este, personas de todo el mundo puedan conocer un poco de nuestro Tucumán y de su identidad”.
VALOR AMBIENTAL. Juntos proponen “recuperar una zona urbana degradada y en desuso, restaurando su valor histórico, social y ambiental”. / CORTESÍA JERÓNIMO MADARIAGA
Concurso Escolar Kashitu
En la categoría escolar del concurso, Matías Ezequiel Bazán Valladares (26), Amelia Muro (27), Federico Kreisel (25) y Miguel Ángel Leguizamón (26) desarrollaron un proyecto educativo para Kashitu, Zambia, que conecta escuelas y espacios comunitarios, e integra la arquitectura vernácula con los conocimientos locales. Esta era una premisa de esa categoría de los Inspireli Awards.
La propuesta no se limita a un edificio aislado, sino que busca que la escuela forme parte de un sistema social más amplio. "La integración de la tradición con la educación abierta hizo que nuestra propuesta fuera única y sensible al contexto", dijeron. Juntos destacaron la importancia del trabajo en equipo: "desde el principio analizamos el lugar, debatimos posibilidades y, luego, cada uno se enfocó en un aspecto específico, siempre intercambiando ideas para mantener coherencia en el proyecto".
OTRO ORGULLO. En la categoría concurso Escolar Kashitu, también impulsado por los Inspireli Awards, son finalistas Matías Ezequiel Bazán Valladares, Amelia Muro, Federico y Kreisel, Miguel Ángel Leguizamón. / FAU
Pero lo que más disfrutaron fue el aprendizaje de participar en un concurso internacional. "Nos enseñó a animarnos, a confiar en nuestras ideas y a recibir críticas constructivas de todo el mundo. Fue una experiencia que nos llenó de orgullo y motivación para seguir creciendo", sumaron.
Todos coincidieron en que el concurso fue una oportunidad para animarse, probar, equivocarse y volver a intentar, y que representa un gran orgullo para la FAU y para Tucumán, lo que demuestra que desde la provincia se puede competir en el escenario internacional de la arquitectura.
PARA LAS PRÁCTICAS COLECTIVAS. El proyecto se basa en la revalorización de la arquitectura vernácula y la integración de los sistemas de conocimiento locales. / FAU
Inspireli Awards en Tucumán
La Facultad de Arquitectura será, por primera vez, la sede de la próxima edición del concurso. El desafío se enfocará en el diseño del Parque de la Memoria del Arsenal, un espacio que combina historia, cultura, educación y recreación. La idea es crear un Centro de Interpretación dedicado a conservar y a transmitir la memoria de los hechos ocurridos en el centro de detención clandestino entre 1976 y 1978.
Pensado bajo la idea de “memoria activa”, contará con espacios para actividades culturales, artísticas, educativas y recreativas que promuevan el diálogo, el intercambio de ideas y el respeto por diferentes perspectivas. El concurso es conceptual, con énfasis en propuestas de fuerte carga simbólica y cualitativa, y está abierto a estudiantes de todo el mundo.






