

Un hombre de 61 años fue condenado a tres años de prisión condicional y deberá pagar $3.000.000 a un jubilado de 87 años al que asaltó en dos ocasiones en su propio domicilio. La condena se alcanzó a través de un juicio abreviado, en el que el acusado reconoció su culpabilidad.
El caso, investigado por la Unidad Fiscal Especializada en Robos y Hurtos IV, reveló la brutalidad con la que el agresor, de 61 años, atacó a su vulnerable víctima.
Según la fiscalía, representada por Francisco Galíndez, el 8 de mayo de 2025, el asaltante engañó al jubilado, residente en la calle San Lorenzo al 900, simulando necesitar una lapicera. Una vez que el anciano abrió la puerta, lo amenazó y lo obligó a entregarle $2.000.000 que guardaba en su ropero, producto de sus ahorros de jubilación.
Lo arrastró al fondo de la casa
El 4 de junio, el agresor volvió a atacar. Esta vez, golpeó la ventana del jubilado, gritando que su casa se estaba incendiando. Cuando el anciano se acercó, el delincuente forzó la puerta, lo agarró del brazo y del cuello, lo arrastró al fondo de la vivienda y le robó $800.000. En ambas ocasiones, el asaltante amenazó de muerte al jubilado si intentaba resistirse o denunciarlo.
La condena fue por la calificación legal de robo en dos oportunidades. La jueza interviniente aprobó el acuerdo de juicio abreviado, que además de la pena de prisión condicional y la reparación económica, incluyó una serie de reglas de conducta que el condenado deberá cumplir para evitar ir a prisión. Este caso pone de relieve la vulnerabilidad de los adultos mayores frente a la delincuencia y la importancia de protegerlos.







