La "revancha" que Atlético Tucumán busca en el torneo Clausura: ¿por qué los próximos cinco duelos son cruciales?

En el "Decano" son conscientes de que cada punto que sume el equipo en esta mini racha tendrá un valor especial.

La revancha que Atlético Tucumán busca en el torneo Clausura: ¿por qué los próximos cinco duelos son cruciales?

En el fútbol, los calendarios suelen repetirse como espejos. Pero lo que no se repite es el contexto. En el Apertura, Atlético Tucumán atravesó una seguidilla que resultó lapidaria: cinco partidos, cinco derrotas. Gimnasia de La Plata, Newell’s, River, Vélez y Platense se transformaron en verdugos sucesivos y dejaron al “Decano” vacío, sin puntos y con la sensación amarga de que la racha había sido una montaña imposible de escalar.

Hoy, el Clausura vuelve a poner en el horizonte esa misma serie de rivales. Y aunque en los papeles la dificultad es idéntica, el presente del equipo es otro: tiene nueve unidades y está dentro de los puestos de playoffs. Esa diferencia es la que convierte a cada unidad obtenida en una especie de triunfo paralelo: una revancha contra el pasado inmediato, un recordatorio de que la historia, incluso en el fútbol, siempre ofrece segundas oportunidades.

Peso de los recuerdos

La memoria reciente es dura. Contra Gimnasia, Atlético cayó 1-0 en un partido trabado, sin reacción. Frente a Newell’s fue 2-1, con bronca incluida por situaciones que no supo aprovechar. River lo venció en Núñez por la mínima, en un trámite que dejó al “Decano” con la impotencia de haber resistido pero no haber lastimado. Luego apareció Vélez, que también lo derrotó 2-1, y Platense, que lo hundió con el mismo marcador.

Cinco partidos, cinco caídas: un pleno de derrotas que no solo no sumaron en la tabla, sino que además hirieron la confianza del grupo. Esa marca fue una mochila que pesó en el Apertura y que todavía se recuerda como uno de los tramos más duros del año.

Un arranque distinto

El Clausura muestra otra cara. Atlético encontró un orden defensivo que antes no tenía: pasó de recibir nueve goles en los primeros cinco juegos de aquel tramo a apenas cinco en la actual comparación. En ataque, la producción es la misma en números -ocho tantos en cada certamen-, pero con un matiz fundamental: en el Apertura apareció una goleada resonante por 5-0 contra Sarmiento que fue un oasis en el desierto de fútbol. Un resultado que condensó la mayoría de la producción goleadora del “Decano”.

Ese crecimiento hace que ahora, al asomarse a la misma seguidilla, el desafío se perciba distinto. La frase que sobrevuela en el plantel es clara: cualquier punto será ganancia. No porque se subestime el presente, sino porque se entiende el valor de aprender de lo ya vivido y evitar repetir una caída en cadena que tanto dolió.

Un “Lobo” herido

El primer capítulo de esta revancha se jugará el lunes en La Plata. Gimnasia llega golpeado tras perder con San Martín de San Juan, una derrota que lo dejó noveno en el Clausura con siete puntos y lo complicó en la tabla Anual, en donde suma 23 unidades y mira con preocupación la cercanía de sus perseguidores.

Alejandro Orfila, su DT, fue tajante al evaluar el momento. “El equipo venía mostrando un buen funcionamiento. No me dejó conforme. Tenemos que tener autocrítica, temple y carácter para salir. No funcionamos como pretendíamos, no fuimos agresivos en ofensiva, no generamos peligro”, dijo.

Renzo Giampaoli, referente en la zaga, buscó poner paños fríos. “Es partido a partido. Tenemos que enfocarnos en corregir errores y hacernos fuertes de local para seguir sumando”, indicó en los últimos días.

El “Lobo” también tiene sus problemas extradeportivos. La salida de Ivo Mammini al AIK de Suecia, que parecía resuelta en U$S 250.000, quedó en suspenso. La revisión médica detectó la necesidad de estudios complementarios en Barcelona. Con el libro de pases europeo cerrando el 31 de agosto, el futuro del delantero es una incógnita.

En cuanto a lesionados, Jan Hurtado ya superó un desgarro, Norberto Briasco intenta llegar al partido del lunes con los tiempos ajustados, Alejandro Piedrahíta será evaluado y Matías Melluso recién volverá después de la fecha FIFA.

Sed de revancha

Atlético se enfrenta a este nuevo tramo con la experiencia de haber tocado fondo en el anterior. El aprendizaje está en no repetir errores, en entender que hasta un empate puede tener el sabor de la victoria si se lo compara con el pasado.

El Clausura ofrece la chance de demostrar que el equipo creció. Que aprendió a resistir mejor, a ser más compacto, a aprovechar sus momentos. Y que los viejos fantasmas de la seguidilla pérdida pueden ser exorcizados con resultados distintos.

La historia se repite, sí. Los nombres de los rivales son los mismos. Pero la película no tiene por qué terminar igual. En esa convicción se sostiene el “Decano”, sabiendo que cada punto arrancado será un trofeo simbólico: la prueba de que se puede reescribir el guión de las derrotas y transformar la pesadilla en una oportunidad de redención.

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