El futuro de Kevin Zenón parecía estar en Europa, pero su pase al Olympiacos se derrumbó. Boca rechazó la propuesta económica y el jugador, que veía con buenos ojos la posibilidad de emigrar, quedó en una situación incómoda.
La respuesta del club fue inmediata. Miguel Ángel Russo empezó a enviarle mensajes claros. En los entrenamientos lo relegó al poner a Lucas Janson y antes había hecho lo mismo con Agustín Martegani.
El castigo se reflejó también en los partidos. Zenón viajó convocado a Mendoza, pero solo ocupó un lugar en el banco frente a Independiente Rivadavia y no sumó minutos, una muestra del presente que atraviesa.
Olympiacos había ofrecido siete millones de dólares por el 80% de su ficha, pero Boca pretendía acercarse a los diez millones. Tras la negativa, los griegos ya apuntan a Santino Andino, de Godoy Cruz.
Ahora el volante de 24 años, con 72 partidos y 10 goles en el club, debe recomponerse. En Boca esperan una reacción que lo devuelva al nivel que mostró cuando llegó desde Unión.
Un desafío personal
Zenón afronta un momento bisagra. Russo lo observa y espera que demuestre si realmente quiere luchar por un lugar en el equipo.







