Matías Mansilla y Nicolás Laméndola asistieron al Hospital del Niño Jesús. Prensa CAT.
En la víspera del Día del Niño, Atlético dejó por un momento de lado la rutina del fútbol para llevar alegría y compañía a quienes más lo necesitan. El plantel profesional, junto a dirigentes y cuerpo técnico, visitó el Hospital del Niño Jesús y compartió la tarde con los pacientes internados, en un gesto que mezcló calidez, compromiso social y emoción.
La comitiva decana estuvo encabezada por la cúpula de la comisión directiva: el presidente Mario Leito, el vicepresidente Ignacio Golobisky y el secretario Mario Ávila. A ellos se sumaron el entrenador Lucas Pusineri, su ayudante de campo Matías Villavicencio, y un grupo de futbolistas del primer equipo. El objetivo era claro: hacer que los chicos vivieran un momento especial, lejos por un rato de la rutina hospitalaria.
Los primeros en llegar, cerca de las 12.20, fueron Golobisky y Ávila. Minutos después apareció el cuerpo técnico: Pusineri y Villavicencio, que arribaron en auto particular. Apenas cruzaron la puerta principal, fueron recibidos por el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz, y por las autoridades del hospital, que los guiaron hacia el hall central, donde se organizó el punto de encuentro antes de iniciar la recorrida.
Poco a poco, los protagonistas de la jornada comenzaron a aparecer cargando bolsas repletas de juguetes. Clever Ferreira, Fausto Grillo, Matías Mansilla y Juan Infante fueron los primeros jugadores en sumarse. Vestían ropa casual, luego de completar el entrenamiento matutino en el complejo de Ojo de Agua.
Con una sonrisa, cada uno tomó varias bolsas y comenzó a preparar los obsequios que entregarían a los niños. No tardaron en sumarse Nicolás Laméndola, Mateo Coronel y Guillermo Acosta, quienes llegaron un poco más tarde que el resto de sus compañeros. Todos ellos llegaron en sus vehículos particulares al sitio.
La visita se desarrolló en un clima de alegría. Entre fotos, charlas, y abrazos, los niños recibieron no solo juguetes, sino también un rato de distracción y afecto. Algunos, tímidos al principio, no dudaron en acercarse a saludar y pedirle a sus ídolos que firmaran camisetas, mochilas o cualquier objeto que tuvieran a mano.
El Día del Niño es siempre una fecha especial, pero para los pacientes del Hospital del Niño Jesús, este año quedará marcado por la visita de Atlético. No se trató solo de un acto solidario, sino de un puente entre el deporte y la comunidad, una muestra de que el club también juega su partido fuera de la cancha.
Cuando la delegación se retiró, cerca de las 14, la sensación era unánime: el mejor gol del día no se anotó en un estadio, sino en los pasillos del hospital, donde las sonrisas fueron la única cuenta que importó.







