
La "isla Heard está desapareciendo.

Los rastros de lo que fue nuestro planeta en un comienzo están desapareciendo. La Isla Heard, situada en el Océano Antártico, perdió casi una cuarta parte de su tamaño, y con ello se extinguen los restos de uno de los lugares más prístinos de la Tierra.
Los glaciares de la remota isla Heard, en el territorio australiano, sufrieron un retroceso significativo por el aumento de las temperaturas de la región subantártica en los últimos 72 años. Esta micronación del océano Austral fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es considerado uno de los lugares más prístinos del planeta, que ahora está en riesgo de extinguirse.
En una nueva investigación, los científicos del centro de investigación Asegurando el Futuro Ambiental de la Antártida (SAEF) de la Universidad de Monash revelaron que la cobertura glaciar de la isla estaba experimentando un declive acelerado.
Datos inquietantes
El equipo de investigación utilizó mapas topográficos e imágenes satelitales para identificar cambios en 29 glaciares de la isla entre 1947 y 2019. Así lograron demostrar la pérdida de nada menos que 64 kilómetros cuadrados de cobertura glaciar durante el período de 72 años, una disminución del 22%.
El equipo notó además que la tasa de pérdida de hielo después de 1988 fue el doble de la observada antes. La reducción de los glaciares de la isla se produjo cuando las temperaturas en la zona aumentaron 0,7 grados centígrados.
Los humanos detrás de todo
"Si bien la Isla Heard es uno de los lugares más remotos de la Tierra, ha sufrido profundas consecuencias del calentamiento climático, que se debe casi con certeza al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero en los siglos XX y XXI", comentó a ABC News el Dr. Levan Tielidze, investigador de SAEF.
"La ubicación de la isla en el Océano Austral la convierte en una parte clave del sistema climático global y un indicador importante de la salud del planeta", afirmó. Pero los pronósticos inquietan a la comunidad científica que advierte que la preservación obedece a una decisión humana.
"Los cambios que estamos observando pintan un panorama realmente claro y preocupante", subrayó. "Si conservamos los glaciares o perdemos la mayor parte de ellos por completo depende de los humanos y del camino de emisiones de gases de efecto invernadero que sigamos", concluyó el especialista.








