

Cuando apenas queda un 10% de batería y estamos lejos de casa, nos apresuramos por encontrar una estación de carga rápida, mientras el celular amenaza por apagarse fatalmente. Conectarlo en un quiosco público parece tentador cuando la carga está baja, pero los expertos advierten que hacerlo puede arriesgarnos a múltiples peligros.
Las estaciones de carga públicas pueden parecer una solución, pero usarlas puede generar más problemas que un simple 10%. ¿Por qué? “Esas estaciones de carga y dispositivos USB pueden modificarse fácilmente para dar a los delincuentes acceso a tu teléfono, incluida la instalación de software en el teléfono”, señala James Goepel, director ejecutivo de Fathom Cyber y profesor de ciberseguridad en la Universidad de Drexel a Reader's Digest.
El peligro de cargar el celular en lugares públicos
Allí se enmarca una práctica poco conocida pero que aparece latente cada vez que conectamos nuestro celular a un puerto USB público. El "juice jacking" es un tipo de ciberataque en el que un dispositivo, smartphone o una tablet se ve comprometido a través de una estación de carga pública, donde los atacantes pueden pueden instalar malware o copiar datos confidenciales aprovechando la conexión USB utilizada tanto para la carga como para la transferencia de datos
Los lugares donde nunca deberías cargar tu celular
Goepel y otros especialistas advirtieron en el medio citado cuáles son esos lugares en que es mejor quedarse sin batería antes que arriesgarse a las consecuencias mayores de un ataque cibernético.
Aeropuertos
Los aeropuertos tienen bancos de estaciones de carga y lugares donde puedes dejar tu teléfono para que se cargue. Pero confiar en dispositivos desconocidos es donde reside el peligro. “Generalmente, los lugares donde la gente no está pensando en la seguridad de sus dispositivos o quizás tiene prisa son los lugares a los que irían los malos y montarían este tipo de ataques”, dice Jason Glassberg, director general de Casaba Security. Pero si traes tu propio enchufe y tu propio cable, te aseguras de no ser una víctima.
Hoteles
Ese puerto USB en el despertador puede parecer útil. Pero potencialmente, “un actor malintencionado podría crear una situación en la que conectes tu teléfono o dispositivo”, dice Glassberg. “Y además de darte una carga, pueden manipular el teléfono o dispositivo para permitirles extraer datos del dispositivo o instalar malware en el dispositivo sin tu conocimiento”.
Autos de alquiler
Hoy en día puedes encontrar puertos USB públicos para cargar por todas partes, incluidos los autos de alquiler. “Son muy convenientes y, a menudo, más fáciles de encontrar que un tomacorriente abierto”, dice Stacey Clements, quien asesora a pequeñas empresas sobre ciberseguridad. Pero en lugar de usar el puerto USB público, ella recomienda usar un adaptador con un tomacorriente e invertir en un cargador portátil.
Centros comerciales
También te estás buscando problemas si usas un quiosco público en el centro comercial para cargar tu dispositivo. “El hub de carga USB puede conectarse a tu teléfono y enviar tu lista de contactos, correos electrónicos y mensajes de texto, buzones de voz, fotos y videos”, según Rich Smith de Reege’s Tech Reviews. “También puede copiar contraseñas, datos bancarios, contactos personales y otros datos guardados en tu teléfono. Ese hub USB público incluso podría transferir programas, como malware, a tu teléfono”.
Bibliotecas
Una biblioteca puede parecer un espacio seguro, pero aun así, debes evitar conectar tus dispositivos móviles a cualquier puerto USB que haya estado fuera de tu control. “Puede que esté perfectamente bien, pero existe el riesgo de que se inicie una transferencia de datos o algo aún más nefasto, como el rooteo del dispositivo”, dice Clay Miller, director de tecnología de SyncDog. “No hay forma de saber si las estaciones de carga públicas han sido comprometidas de alguna manera, por lo que es mejor prevenir que lamentar”.
Cafeterías
Expertos en ciberseguridad advierten que los delincuentes están instalando lectores y descargadores ocultos entre los puertos USB y las fuentes de energía en cafeterías, aeropuertos, salones y otros lugares públicos, dice el ex ejecutivo de Microsoft y experto en ciberseguridad J. Eduardo Campos. “Peor que entregar tu información a un tercero desconocido, tu teléfono puede ser ‘infectado’ por malware descargado en tu teléfono”, dice Campos. “Luego, el delincuente simplemente monitoreará el uso de tu teléfono y esperará para recopilar cualquier dato financiero o información sensible, o simplemente usará tu plan de datos para realizar transacciones fraudulentas”.








