Registrarte en una página, solicitar un servicio por internet, hacer una compra en plataformas online o suscribirte a un newsletter implica siempre dejar tu correo electrónico. Al no haber una legislación que funcione de manera eficaz en Argentina, estos datos tienden a filtrarse y pasar de una empresa o institución a otra, originando lo que se conoce como correo no deseado o spam.
Si usás habitualmente tu correo, sabrás de qué se trata. Cada semana pueden llegar decenas de mensajes a una casilla y muchos de ellos pueden no haber sido solicitados o incluso podemos haber llegado a perder el interés en la información que antes queríamos recibir. Para estas ocasiones, la herramienta “cancelar suscripción” o “unsubscribe” debería funcionar como una solución.
Pero un especialista recomienda tener cuidado con este botón que suele ubicarse al final de cada correo electrónico. Asegura que detrás de una configuración fraudulenta en un mail puede haber una estafa escondida.
Cómo proteger mi correo electrónico de botones fraudulentos
Según TK Panini, responsable de tecnología de la empresa DNSFilter, los ciberestafadores agregan links fraudulentos detrás del botón “cancelar suscripción” para dirigir a los usuarios a sitios que vulneran su privacidad y seguridad. Según datos de la empresa, uno de cada aproximadamente 650 enlaces de este tipo puede contener una estafa.
El error está en entregar más datos cuando alguien busca cancelar una suscripción. Si al tocar “Unsuscribe” o “Darse de baja”, te redirigen a una página que te pide más información –como usuarios, claves, pines o contraseñas–, es mejor desconfiar. Generalmente, las páginas para darse de baja no solicitan este tipo de información, sino que ofrecen directamente una forma para cancelar la suscripción e informar nada más que los motivos por los que se solicita.
Una alternativa para protegerte es usar la opción de ocultar tu correo desde dispositivos Apple. También hay funciones similares si navegás desde Chrome de Google o incluso Firefox. Estas herramientas impiden que tu correo sea visto por cualquiera y, en consecuencia, se te incluya involuntariamente en listas para recibir información indeseada.








