La obra del acueducto de Vipos se encuentra entre las prioridades del Gobierno nacional para este año, según anunció el secretario de Obras Públicas de la Nación, Luis Giovine, en el discurso que brindó en la 70° Convención Anual de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), en Buenos Aires. Con una inversión de $ 127.000 millones, se trata del proyecto hídrico más grande de los cuatro mencionados por el funcionario -los otros son el acueducto de Albigasta (Catamarca/Santiago del Estero, con una inversión de $102.000 millones; el acueducto de Chaco ($71.000 millones); y la Planta de Tratamiento de Pinamar ($23.000 millones)- y esta semana se haría el llamado a licitación.
Es un anuncio importante para Tucumán, que se encuentra en una situación compleja con respecto a la provisión de agua. Con El Cadillal que tiene una colmatación aproximada del 40% y con la presa 3 bajo cuidados a causa de filtraciones; con una red de canales de agua que acusa fuerte deterioro y con un crecimiento urbano en el Gran Tucumán que requiere agua y ha llevado a lo que se llamó “estrés hídrico” de las napas subterráneas, la obra de renovación del viejo acueducto de Vipos ha sido planteada como una de las soluciones inmediatas para estos tiempos. Cuando se hizo el primer anuncio, hace tres años, se estimaba que iba a resolver la crisis de agua de unas 240.000 personas del Gran Tucumán, desde el noroeste de la Capital hasta Tafí Viejo, Los Nogales y Tapia, pasando por Yerba Buena, Cebil Redondo y Villa Carmela. Ahora hay, aparentemente, un nuevo proyecto, más amplio, y se habla de una población de 400.000 personas beneficiarias. El mensaje de Giovine fue seguido con atención no sólo por los principales empresarios tucumanos del rubro de la construcción, sino también por la Casa de Gobierno. El ministro de Obras Públicas, Marcelo Nazur, expresó en diálogo con LA GACETA que este proyecto hídrico es “muy importante”. Además, confirmó que en las próximas horas la Nación definirá el cronograma para la licitación de los trabajos. “Es una obra trascendental para Tucumán, que va a solucionar uno de los problemas que tiene el acueducto antiguo, que es su capacidad: la va a triplicar. Y va a mejorar sustancialmente el suministro de agua para todo el Gran San Miguel de Tucumán”, expresó. El ministro dijo que “se va a refuncionalizar toda la toma de agua en el río Vipos. Y va a permitir una mejor calidad de agua a la planta de Aguas Corrientes”, añadió el ministro. El viejo acueducto, que tenía muchas pérdidas y ha sido reparad, tiene límites para abastecer a una zona que ha ido creciendo sin pausa en los últimos años. De hecho, muchas urbanizaciones en el piedemonte acusan severos problemas de provisión de líquido a pesar de que se construyen pozos y al mismo tiempo hay proyectos que están demorados precisamente a causa de la crisis hídrica
Según los anuncios, la ejecución de este proyecto tendrá efecto en el servicio de agua potable, pero también fortalecerá la provisión para riego en el campo y para el sector industrial, que en los últimos tiempos han resultado relegados debido a que la provisión para consumo humano es primordial a la hora de definir prioridades en la crisis del agua. Es de esperar que el proyecto de materialice cuanto antes.







