22 Abril 2025
Las historias que vinculan al papa Francisco con San Lorenzo son muchas. Algunas son entrañables, como cuando bromeaba sobre la rivalidad con Huracán o bautizaba a Ángel Correa. Pero hay una que se volvió célebre por su tono insólito: la vez que, según Alfio “Coco” Basile, el actual Pontífice fue echado del vestuario del Ciclón por considerarlo “mufa”.
Basile, hombre de fuertes cábalas, lideró a San Lorenzo en 1998 y desde el inicio dejó claras sus reglas. En su primer partido, mientras los jugadores se preparaban para la arenga final, vio entrar a un cura. Intrigado, le preguntó al entonces presidente Fernando Miele quién era. “Es un cura hincha que siempre viene a dar la bendición”, le respondió.
Lejos de agradecer la presencia espiritual, Basile reaccionó con desconfianza. “Si me trajiste porque el equipo no gana, no puede entrar alguien que viene siempre. ¡Sacalo, es mufa!”, fue su orden tajante. Miele intentó mediar, pero finalmente le pidió al sacerdote que se retirara, ante su evidente incomodidad.
Años después, el propio Miele revivió la escena y reveló lo que había dicho tanto Basile como él mismo en ese momento. Le comunicó al cura: “Te tenés que ir porque el técnico nuevo no quiere a nadie extraño en el vestuario”. El sacerdote aceptó en silencio. Lo que ninguno imaginaba era quién era realmente ese hombre.
La respuesta de Miele a Basile
En 2013, durante un encuentro casual en el Hotel Faena, Miele le dio a Basile el giro inesperado: “¿Viste quién es el Papa? Es el que vos echaste del vestuario”. Basile quedó atónito. El cura que había retirado por cábala no era otro que Jorge Bergoglio, el flamante líder del Vaticano.
La anécdota, teñida de superstición, simpatía y confusión, se convirtió en una de las más recordadas del fútbol argentino. Aunque nunca hubo una confirmación oficial de que el expulsado fuera efectivamente Francisco, el relato siguió creciendo con el tiempo y se instaló como uno de esos mitos que mezclan fe, fútbol y folklore.
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