Captar aspirantes a árbitros de rugby es todo un desafío

Captar aspirantes a árbitros de rugby es todo un desafío

Maximiliano Cáceres Cano, titular del referato de la URT, brinda un panorama actual sobre el tema y anticipa la expansión de las escuelas.

DE CERCA. El comportamiento de las tribunas es un factor clave en la dificultad para sumar nuevos aspirantes. Para mejorarlo, se necesita el apoyo de los clubes. DE CERCA. El comportamiento de las tribunas es un factor clave en la dificultad para sumar nuevos aspirantes. Para mejorarlo, se necesita el apoyo de los clubes. Foto: Juan Pablo Sánchez Noli (La Gaceta).

Entre los mandamientos del rugby hay dos que resaltan la importancia del árbitro: aquél que dice que "siempre tiene la razón" (aunque no la tenga) y el que establece que sin él (o ella) "no se puede jugar". Sin embargo, la realidad no siempre va de la mano con esos preceptos. Los reclamos hacia los árbitros son moneda corriente -incluso en partidos de divisiones juveniles- y su vehemencia ha ido en aumento, lo que genera preocupación tanto en la UAR como en las uniones provinciales, ya que no sólo afecta negativamente la imagen del deporte, sino que además repercute en la captación de nuevos aspirantes y en la sostenibilidad de árbitros jóvenes. Esto genera que haya menos opciones para dirigir, y a la larga el nivel del arbitraje se resiente.

"La captación es un problema a nivel nacional. Todas las uniones tienen dificultades con ese tema", reconoce Maximiliano Cáceres Cano, presidente de la Comisión de Árbitros de la URT. "Acá se está trabajando mucho con eso. Por medio del Consejo, se está hablando con gente de los clubes para tratar de bajar un cambio en el comportamiento de la gente. También con managers de las divisiones juveniles, porque muchos padres se exceden. El árbitro se puede equivocar, y sin dudas que lo va a hacer, porque los jugadores y los entrenadores también se equivocan. Pero si mandás a un chico nuevo a dirigir y le están reclamando cada vez que cobra algo o incluso algunos lo insultan, qué ganas le van a quedar. Antes que pasar un mal rato, va a preferir quedarse viendo Netflix en la casa", grafica Cáceres Cano.

Cabe recordar que, por reglamento, cada club afiliado a la URT debe aportar un árbitro o dos aspirantes por cada división competitiva (es decir, de M15 en adelante). Dicha regla no siempre se cumple, de tal suerte que el número de árbitros siempre está muy por debajo del que sería ideal para la cantidad de partidos que hay por fin de semana, por lo que algunos deben dirigir más de uno. "Se habló con los presidentes para remarcar la importancia de que se cumpla esa norma, porque así como se van renovando los jugadores, también es importante renovar árbitros. Por fortuna, los clubes parecen haber entendido la importancia de generar nuevos árbitros y han empezado a mandar aspirantes. En 2022, hemos llegado a tener alrededor de 25 aspirantes, de los cuales se recibieron 16 o 17. Es un buen porcentaje. Hay algunos que ya estuvieron dirigiendo en M14", destaca Cáceres Cano.

Actualmente, el panel arbitral de la URT se compone de 52 referís, a los cuales se sumarán unos 12 que ya estarían en condiciones de dirigir este año, al menos en divisiones juveniles. "Sería bueno sumar una cantidad similar para 2025. Por lo pronto, ya tenemos dos arbitros nuevos que están para dirigir en nivel superior, esto es Intermedia y Primera. Son Álvaro Pedro y Santiago Plaza. Ambos tienen un buen nivel y son muy jóvenes, así que tienen mucha proyección", resalta.

Coaching

Una de las novedades que se implementó el año pasado fue una suerte de padrinazgo, en virtud del cual árbitros con experiencia en el nivel superior tutelaron a otros más jóvenes, acompañándolos y evaluándolos en el campo. "La Comisión hizo un listado de árbitros en crecimiento para trabajarlos con un seguimiento más especifico y constante. La idea básicamente es ver los partidos que se puedan y seguirlos semana a semana con las herramientas de coaching que tenemos", detalló Santiago Altobelli, quien tuvo a su cargo a Noelia Argüello y a Julián Montenegro. Junto a Altobelli también estuvieron Álvaro del Barco, Carlos Pinto, Matías Ortiz de Rozas y José Agüero, quienes tomaron a su cargo el seguimiento de otros árbitros.

"Es más personalizado y dio muy buenos resultados, así que este año lo vamos a continuar. Hay que destacar la colaboración y el compromiso de los árbitros para llevar a cabo esto, y también el apoyo del Consejo de la Unión", completó Cáceres Cano.

Escuelas

Las clases para los nuevos aspirantes a árbitro comenzarán a mediados de marzo y seguirán dictándose en Tucumán Rugby para los que viven en Yerba Buena o capital, y en Coipú (Famaillá) para quienes residen en el sur. Sin embargo, este año se sumarían dos nuevas aulas para acercar la escuela a los potenciales alumnos: una en Huirapuca (Concepción) para darle otra opción a los del sur, y otra en Tafí Viejo. No obstante, ambas están pendientes de confirmación. "La intención es tener árbitros en todos los puntos de la provincia", explica el titular del referato tucumano.

Hombres y mujeres pueden presentarse como aspirantes en las clases, que son teórico prácticas. "Buscamos preferentemente gente joven, pero todos son bienvenidos. Si hay personas de 35 o 40 años que estén interesados y demuestren condiciones, nos sirve mucho. Tenemos casos de árbitros que empezaron tarde y que el año pasado dirigieron Intermedia, por ejemplo", grafica "Maxi".

Las clases comienzan con una introducción al referato, aunque en los casos de jugadores que continúan en actividad o dejaron hace poco, la parte teórica suele acelerarse por su conocimiento del juego y se enfoca en la parte práctica. "Lo primero que se enseña es el posicionamiento en cada situacion de juego: en los lines, en los scrums, en los rucks y demás. Y luego ya empiezan con la práctica en partidos de M14. Es una clase teórica por semana y la práctica el fin de semana. Y como hay horarios de clase que coinciden con el de algún entrenamiento de alguna división, los aspirantes pueden observar el entrenamiento. De esta manera se va generando un vínculo entre los árbitros, los jugadores y los clubes, que es lo que buscamos", concluye Cáceres Cano.

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