Tiene 10 años, soñaba patinar como "Soy Luna" y hoy es subcampeona Panamericana

Tiene 10 años, soñaba patinar como "Soy Luna" y hoy es subcampeona Panamericana

Sol Orellana comenzó a competir en 2021 y rápidamente escaló varias categorías de la Confederación Argentina de Patinaje, en 2024 participará en la B2.

EN SU MUNDO. Sol ensayó algunas figuras en la plaza principal de Alderetes. Foto La Gaceta / Antonio Ferroni EN SU MUNDO. Sol ensayó algunas figuras en la plaza principal de Alderetes. Foto La Gaceta / Antonio Ferroni

Mamá, papá y abuela esperan junto a Sol Orellana en la plaza principal de Alderetes. El cielo luce un celeste inmaculado como el traje de la patinadora artística de 10 años que, con timidez, se acerca al playón donde posará para las fotos. El volumen bajo de su voz, y su sonrisa, dejan en claro su nerviosismo mientras se dirige a una pista improvisada, que si bien no es la del club San Martín, tiene un espacio acorde para ensayar unos saltos.

Todo cambia cuando las ruedas empiezan a girar. Allí ya se la nota relajada y disfruta de lo que hace. Sabe bien qué hacer. “Uh, no tuvo calentamiento previo”, dice alguien. No importa.

Dos o tres vueltas y empieza con los giros, los saltos y las diferentes poses. En la pista todo fluye con naturalidad. “Patino desde los cinco años. Comencé porque me gustaba mucho y rápidamente empecé a disfrutarlo. Mis primeros patines fueron unos de Soy Luna”, responde Sol, otra vez con la timidez lógica de su edad, que sólo aparece frente al micrófono y que seguramente en algunos años dominará a la perfección como hace con la pista y los patines.

El patinaje artístico es una disciplina deportiva de deslizamiento. Los deportistas compiten mientras van combinando elementos deportivos con facetas artísticas. Su práctica requiere de una buena preparación física y de una gran capacidad de concentración. Por ese motivo Sol, además de los entrenamientos en San Martín a cargo de la profesora Camila Coria, trabaja de manera particular con los profesores Franco Narese y Florencia Pacheco en la parte física, y con Luciana Orquera en el aspecto nutricional.

BILLMAN: Esta figura la pierna que se encuentra en el aire se sujeta con las dos manos. Foto: La Gaceta / Antonio Ferroni BILLMAN: Esta figura la pierna que se encuentra en el aire se sujeta con las dos manos. Foto: La Gaceta / Antonio Ferroni

“Comenzó con esta disciplina desde muy chica y le encantó desde el primer momento. No deja de patinar ni en la casa; estamos contentos por poder guiarla y acompañarla. Es complicado por lo económico y por el tema de los horarios de entrenamientos, pero lo hacemos con gusto”, indicó Eugenia Romano, mamá de Sol.

Para un deportista amateur, alcanzar los objetivos exige mucho más que una dura preparación. Los gastos deben ser cubiertos por cada uno y no es sencillo. Especialmente cuando hay que viajar al exterior para participar en una competencia internacional, situación que le pasó hace algunos meses cuando viajó a Río Negro (Colombia) para competir en el Campeonato Panamericano de Patinaje Artístico, y su familia tuvo que hacer una colecta para afrontar los costos. “Estaba un poco nerviosa porque estaba lejos de mi familia, pero hablábamos por el celular de mi profesora. Me fue muy bien, salí subcampeona”, responde orgullosa en relación al segundo puesto que obtuvo en su categoría “Promotional Runner-up Pan American Figure Skating Games”.

“Creció mucho en poco tiempo”, dice Eugenia mientras Sol patina en la plaza ante la mirada de una nena de unos cinco años que, subida en sus patines rosas, observa con atención. “Comenzó a competir en 2021 en la categoría “D inicio”. A partir de ahí empezó a saltar categorías. En 2024 estará en B2. El año pasado hizo el clasificatorio para formar parte del seleccionado argentino y participó del Panamericano de Colombia. Ella tiene talento; es constante y responsable. Está todo el tiempo entrenándose”, agrega.

Cuando su mamá y su papá hablan, dejan en claro el orgullo que sienten por su pequeña hija. El patín es un deporte amateur y conlleva un sacrificio grande. Con tal de cumplir el sueño de Sol, ellos se muestran firmes a su lado. “Para que viaje a Colombia hubo mucha gente que nos ayudó. San Martín se portó de 10 también”, valora papá Pablo Orellana.

MULTICAMPEONA. En poco tiempo de competencia, Sol cosechó varias medallas, en 2024 irá por más. Foto: La Gaceta / Antonio Ferroni MULTICAMPEONA. En poco tiempo de competencia, Sol cosechó varias medallas, en 2024 irá por más. Foto: La Gaceta / Antonio Ferroni

Sin descuidar la escuela y las actividades típicas de una niña de su edad, Sol por el momento sólo se dedica a patinar. Sin embargo sus papás ya saben lo que se puede venir. “Somos conscientes lo que está pasando, es probable que se deba ir a otro lugar para hacer una carrera. El deporte es un trampolín para que ella se pueda abrir su camino”, añade el padre.

Con medallas y uno de los patines de Soy Luna en la mano, Sol responde con contundencia sobre lo que espera para su futuro. “Quiero ser la mejor”, dice con la convicción y la sinceridad propia de una niña que en casi dos años saltó varias divisiones y tiene bien clara su meta.

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