Murió Marga López, una diva del cine

Murió Marga López, una diva del cine

Había nacido en Tucumán el 21 de junio de 1924. La reina melodramática del cine mexicano falleció de una arritmia cardíaca.

06 Julio 2005
Ciudad de MExico.- Catalina Margarita López Ramos, conocida en el mundo del espectáculo como Marga López, se consagró reina melodramática del cine mexicano por sus interpretaciones durante la "época de oro" del cine en México.
La actriz, que murió el lunes, nació en Tucumán el 21 de junio de 1924 y a los 14 años llegó a la Ciudad de México de gira, con la orquesta infantil "Los hermanitos López". En 1941 se instaló definitivamente en el país y desde entonces, desarrolló una prolífica carrera, en la que se destacan 83 películas para la pantalla grande, 16 actuaciones en telenovelas y un variado repertorio teatral.
Su vida, como sus personajes, tuvo ribetes melodramáticos. Dos veces casada y divorciada del productor mexicano Carlos Amador, madre de dos hijos, siendo muy joven tuvo que volver a las tablas para enfrentar una delicada situación económica. En 1955 adquirió la nacionalidad mexicana. "Yo pienso que tengo sangre española", sintetizó una vez. "Nací en Argentina, pero soy mexicana; eso es una verdad, me siento mexicana", dijo la actriz, con más de 50 años de carrera en México. Gracias al reconocimiento popular de "Los hermanitos López" obtuvo su primer papel para el cine. Un pequeño papel de mesera de cabaret en una escena con Germán Valdés "Tin Tan" en el filme "El hijo desobediente" (1945). Tras esa filmación, comenzó una carrera en ascenso que la llevó a convertirse en una figura mítica del cine mexicano. Con "Salón México" (1949), película premiada en el Festival de Cine de Bruselas, la actriz empezó a adquirir trascendencia internacional y obtuvo el reconocimiento de la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas que, a lo largo de su carrera, le otorgó tres premios por su desempeño profesional y una distinción por su trayectoria. El punto más alto de su filmografía lo alcanzó interpretando a Beatriz, una prostituta epiléptica, bajo la dirección de Luis Buñuel, en el filme "Nazarín" (1958), película basada en un clásico de Benito Pérez Galdós y premiada en el Festival de Cannes de 1959. Después de esta experiencia, López viajó a Europa, donde realizó varias coproducciones junto a actores relevantes del cine español.
En la cúspide de su fama, ya impuesto su nombre en la historia del cine, Marga López se enamoró. Esta vez del popular actor mexicano Arturo de Córdova. La relación duró nueve años, hasta que en 1973 él falleció a consecuencia de una larga enfermedad. "Dos grandes amores he tenido -confesó la actriz en 1996. Arturo de Córdova, en la vida real, y Pedro Infante, en la pantalla".
En la década del 70 empezó a declinar su intensa actividad, aunque permaneció presente en el público mexicano a través de telenovelas y con sus presentaciones en teatro, donde profundizó su faceta de comediante. Su última aparición en la pantalla grande fue en "Reclusorio" (1995), a pedido del director Ismael Rodríguez, por quien la actriz profesaba respeto y admiración. (DPA)

Los tucumanos la visitaban en su casa
ERA MUY BONITA Y GENEROSA.- "Dos veces la vi en México, en 1962 y en 1968. En la primera oportunidad, ella y su marido, Carlos Amador, nos invitaron a la première de la película ?La edad de la inocencia?. Era una mujer muy bonita y generosa. Cuando ya estaba con Arturo de Córdova, nos había invitado a su casa, donde residía con su hermana y con su madre. Para mí fue una pena ver al actor hemipléjico, muy lejos de la imagen de galán. (Arturo Poliche)

TENIA UNA GRAN SENCILLEZ.- "Fuimos a visitarla en México, en 1999, junto a José Vecce (foto). La quería conocer porque era tucumana, y era todo un ícono en ese país. Nos frecuentamos un poco; era muy generosa; nos recibía en una casa maravillosa en el barrio residencial ?Jardines del pedregal?. Creo que era un ejemplo a seguir, no sólo artísticamente, sino como persona, porque, a pesar de todo, tenía una sencillez única. Había sufrido mucho. Lo que pocos saben es que, además, pintaba y había estudiado en un taller: había realizado varios autorretratos; también, un retrato de Arturo de Córdova, por quien sentía una gran devoción". (María Angélica Robledo).

ORGULLO.- Su última visita a esta ciudad fue en abril de 1980. Le contó a LA GACETA que siempre había querido regresar a su tierra natal. "Estoy orgullosa de ser tucumana, y a todos los lugares donde voy cuento que nací en el ?Jardín de la República?", dijo.

"NOS COCINO EN SU CASA".- "Mi mamá era Cata, su prima, que integró el grupo de ?Los hermanitos López?. Fui a visitarla en 2001 y nos atendió extraordinariamente, y ella misma cocinó la comida. Se brindaba mucho a su familia, a pesar de que era una mujer muy ocupada. La última vez que vino a Tucumán fue para el cumpleaños de mi hija". (María Cuezzo de Fernández, sobrina)

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