09 Junio 2005
La Paz.- El Congreso de Bolivia se pronunciará hoy sobre la renuncia del presidente Carlos Mesa y sobre la designación de su sucesor, que distintos sectores perfilan como la salida al conflicto que sufre la nación, mientras se cierne el temor de una guerra civil. Los legisladores se trasladarán a Sucre para definir si aceptan o rechazan la dimisión de Mesa, y para asumir la tarea de dar paso a una sucesión según lo establecido por Constitución. La pugna por el poder se trasladó al Legislativo, donde los tiulares del Senado, Hormando Vaca Díez, y de la Cámara Baja, Mario Cossío, aparecen en la lista para suceder a Mesa. Distintos sectores políticos y sociales rechazan, sin embargo, la posibilidad de que uno de ellos asuma las riendas del país. Inclusive, Mesa le pidió a Vaca Díez y a Cossío que declinen esa posibilidad. Otra alternativa es la asunción del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Eduardo Rodríguez. En tanto, campesinos que exigen la nacionalización de los hidrocarburos ocuparon siete campos petroleros en el oriente de Bolivia, en un nuevo día de protestas que se caracterizó por algunos disturbios en La Paz y amenazas de choques en rutas que siguen bloqueadas. Los habitantes de la capital cargan con el padecimiento de la falta de gas y de nafta, así como con el desabastecimiento de alimentos. (DPA-Reuter)
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