"Llevo una vida nueva"

"Llevo una vida nueva"

El "Demonio" habla de su actualidad basquetbolística y de su lucha contra la drogadicción.

EN EL EQUIPO DONDE NACIÓ COMO JUGADOR. Sánchez está jugando la Liga C con Villa San Martín, de Resistencia. GENTILEZA FOTO DEL DIARIO EL NORTE DE CHACO EN EL EQUIPO DONDE NACIÓ COMO JUGADOR. Sánchez está jugando la Liga C con Villa San Martín, de Resistencia. GENTILEZA FOTO DEL DIARIO "EL NORTE" DE CHACO
RESISTENCIA.- Habla de Tucumán y sus ojos se iluminan. Los recuerdos lo llevan a fines de los 90, cuando integró el plantel de Belgrano que ascendió a la elite del basquetbol argentino. Una época que Diego Leonardo Sánchez no olvidará jamás. Hace poco se reencontró con Sergio Ale durante uno de los viajes de Talleres a territorio chaqueño y revivieron esos momentos. El "Demonio", nacido en Resistencia y con una trayectoria que abarcó clubes en distintos puntos del país, habló con LG Deportiva de su presente basquetbolístico y de la batalla que sigue librando contra las drogas. "Sigo jugando al básquet para mi club de origen, Villa San Martín, que participa del regional de la Liga C y con ganas de llegar al Torneo Federal. Llevo una vida nueva, totalmente recuperado, en pareja y con mi familia feliz. Disfruto de la vida sana y con deseos de seguir ganando cosas. A veces, a los 37 años, parece imposible, pero gracias a Dios el entusiasmo y las ganas no las perdí", señala el escolta que jugó en Belgrano, Central Córdoba, Alberdi y Tucumán BB.

Sobre su problema de adicciones, confiesa sin tapujos que hace casi dos años "está limpio", sin consumir ningún tipo de sustancias. "Gracias a Dios", exclama.

En cada charla, no pierde la oportunidad de señalar su cariño por Tucumán y admite sus deseos de integrar el seleccionado provincial. "Si me convocan jugaría encantado. Tucumán es mi segunda casa. Me hizo conocido en todo el país y me dio la oportunidad de jugar la Liga Nacional. Allí disfruté los mejores momentos de mi carrera deportiva. Sería un orgullo vestir la camiseta para devolverle algo de lo que esa gran provincia me dio", resalta.

El valor que tuvo para no ocultar su problema juega a su favor. "Reconocer la enfermedad es el primer paso si querés recuperarte. Curarte es un paso mucho más largo, pero uno con el tiempo se da cuenta de que al tener una enfermedad y asumirla se ayuda a sí mismo y a las personas que lo rodean. Un adicto tiene que reconocer, por sobre todas las cosas, la buena educación que recibió de sus padres para seguir el buen camino", expresa sin remilgos.

Siempre verborrágico, "El Loco" no se guarda nada: "lamentablemente tuve problemas, como los podemos tener todos, aunque muchos no lo reconocen. Tuve la suerte y la valentía de hacerlo, enfrentarlo, recuperarme y hoy verlo como algo del pasado. Este es un gran momento de mi vida: no uso el celular, que siempre queda en casa y tampoco llevo dinero conmigo, para no tentarme como en otros momentos. Creo que eso ya forma parte del pasado y estoy en un proceso de recuperación que gracias a Dios ya lleva dos años".

Recibió emocionado un ejemplar del libro "El Señor de los Éxitos", que refleja la tarea dirigencial de Horacio Muratore, vicepresidente 1º de FIBA. Y recuerda, con nostalgia, su estancia en Tucumán. "Para mí no pasaron los años. Yo soy un agradecido de Tucumán y de su gente por todo el cariño y el amor que me dieron", dice antes de mandar saludos a una extensa lista de personas a las que conoció en aquellos tiempos.

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