Facebook borra límites entre alumno y docente

Los jóvenes ya no tienen que esperar hasta la próxima clase para despejar sus dudas, preguntar por horarios de consulta o averiguar la fecha de un parcial. Entre las modificaciones de hábitos que produjo la revolución de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, gracias al empleo de herramientas como las cuentas de e-mail o Facebook, figura una mayor agilidad de la relación entre docentes y alumnos.

Las mayor ventaja para los estudiantes es que les permite ahorrar tiempo y, a la vez, les posibilita conocer otros aspectos de quien se para frente a la pizarra.

En este sentido, Ashley Matheus, estudiante de la carrera de Teatro y de Cine en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), aseguró que la mayor ventaja de estos formatos es que permiten reducir la brecha temporal entre clase y clase.

"Es posible puntualizar alguna tarea o una información de manera mucho más rápida que antes. Además, el docente puede ser más preciso con su pedido y el alumno responder más rápido", afirmó.

Dos espacios distintos

Los estudiantes distinguieron entre las características y las posibilidades que brindan estos espacios. "El e-mail no se muestra como un espacio público, ni plantea una relación de igualdad. En cambio, el Facebook sí, partiendo del hecho de que agregamos a alguien como 'amigo' y que en nuestro perfil se encuentran publicados nuestros pensamientos, intereses, fotos, etcétera", señaló Constanza, estudiante avanzada de la carrera de Comunicación.

Aldana Ojea Delgado afirmó que prefiere el contacto por mail antes que a través de la red social. "No sé si mis profesores tienen o no Facebook, pero no los aceptaría como amigos, porque no me gustaría que vieran el otro lado de la alumna ¡Una ahí dice todo!", expresó la joven que cursa cuarto año de Artes Plásticas.

Por otro lado, Lourdes Avellaneda dijo que incluye entre sus amigos a docentes pero sólo a aquellos con los que tiene más confianza. "Es otro tipo de vínculo el que se construye. Puede que sea menos formal, porque tenés acceso a fotos de viajes o a información más personal pero nunca perdés el respeto", afirmó la estudiante de Derecho de la UNT.

En tanto, Ignacio, otro alumno de Comunicación, intenta complementar ambos formatos. "A través del Facebook veo si vale la pena mandarle un mail a mis profesores, porque tal vez en su estado figura que están subiendo el Himalaya", dijo.

Aunque para el joven estas posibilidades también tienen su costado negativo. "Uno se tiene que cuidar de lo que escribe. Ya no podés decir 'ay, no tuve tiempo de hacer el trabajo' si en tu estado figura 'me mata la resaca' o algo así", agregó.

Matheus coincide en que al aceptarse como "amigos", ambas partes tendrían que tener mayor cuidado con sus publicaciones. "Además, no sólo depende del uso propio sino del que hagan los amigos de cada uno en los muros", advirtió.

Por otro lado, Emilia Dzienczarski, estudiante de la Licenciatura en Francés, postuló que la relación entre docentes y alumnos, no sufre grandes modificaciones a partir del contacto por medio de Facebook. "Se pueden realizar consultas de una forma más distendida, pero cada uno siempre mantiene su rol", expresó.