23 Julio 2009
Quiero poner en conocimiento de todos la estafa a la que fuimos sometidos un grupo de 40 médicos y enfermeros de la provincia. Fuimos convocados a trabajar en la epidemia del dengue en el norte de nuestro país en febrero, marzo y abril.
Cuando las miradas de los medios masivos de comunicación apuntaban en esa dirección, fuimos nosotros los que le pusimos el pecho a la grave situación sanitaria que vivían nuestros comprovincianos.
Nos pidieron que trabajemos en situaciones de extrema precariedad (en carpas o al aire libre) con falta de insumos y de elementos de protección personal, en el contexto de una grave epidemia, y así lo hicimos.
Nos pidieron que nos paguemos el pasaje en ómnibus de ida y vuelta, la estadía en hoteles de la zona y la comida consumida, y así lo hicimos.
Nos pidieron que emitiésemos facturas como moniotributistas del trabajo prestado, así como las facturas de lo gastos, y se las dimos.
El dinero iba a ser depositado a los siete días de terminada la labor. Casi cuatro meses después, aún no se nos pagó.
Fuimos estafados por el Estado. Nos metieron la mano en el bolsillo, se nos usó mediaticamente para que la sociedad creyera que estaban haciendo algo.
Me pregunto ¿Y la plata destinada a esta epidemia de dengue? ¿Donde están los millones de pesos que se giraron para esta campaña?
Los responsables son la Dirección Nacional de Emergencia Sanitarias (Dinesa) y la Dirección Provincial de Emergencias.
Juan Manuel Nuñez
(mail reenviado por Luis Francisco Presti, presidente de la Asociación de Gerontología y Geriatría del NOA)
A dónde deben dirigirse los lectores
Para enviar fotografías y mensajes a la sección "Los lectores dicen" los interesados deben escribir a redacció[email protected]. Sólo se aceptarán textos e imágenes que no estén escritos con mayúsculas y que consignen nombre y apellido, e-mail, domicilio real y teléfono, aunque sólo serán publicados el nombre y el correo electrónico. LA GACETA.com, de acuerdo al caso, podrá reservarse la identidad de los lectores.
Cuando las miradas de los medios masivos de comunicación apuntaban en esa dirección, fuimos nosotros los que le pusimos el pecho a la grave situación sanitaria que vivían nuestros comprovincianos.
Nos pidieron que trabajemos en situaciones de extrema precariedad (en carpas o al aire libre) con falta de insumos y de elementos de protección personal, en el contexto de una grave epidemia, y así lo hicimos.
Nos pidieron que nos paguemos el pasaje en ómnibus de ida y vuelta, la estadía en hoteles de la zona y la comida consumida, y así lo hicimos.
Nos pidieron que emitiésemos facturas como moniotributistas del trabajo prestado, así como las facturas de lo gastos, y se las dimos.
El dinero iba a ser depositado a los siete días de terminada la labor. Casi cuatro meses después, aún no se nos pagó.
Fuimos estafados por el Estado. Nos metieron la mano en el bolsillo, se nos usó mediaticamente para que la sociedad creyera que estaban haciendo algo.
Me pregunto ¿Y la plata destinada a esta epidemia de dengue? ¿Donde están los millones de pesos que se giraron para esta campaña?
Los responsables son la Dirección Nacional de Emergencia Sanitarias (Dinesa) y la Dirección Provincial de Emergencias.
Juan Manuel Nuñez
(mail reenviado por Luis Francisco Presti, presidente de la Asociación de Gerontología y Geriatría del NOA)
A dónde deben dirigirse los lectores
Para enviar fotografías y mensajes a la sección "Los lectores dicen" los interesados deben escribir a redacció[email protected]. Sólo se aceptarán textos e imágenes que no estén escritos con mayúsculas y que consignen nombre y apellido, e-mail, domicilio real y teléfono, aunque sólo serán publicados el nombre y el correo electrónico. LA GACETA.com, de acuerdo al caso, podrá reservarse la identidad de los lectores.
Lo más popular
