El Poder Legislativo avanzó ayer con el tratamiento de un pedido de interpelación dirigido al ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer, con el objetivo de que el funcionario del gobernador Juan Manzur concurra al cuerpo colegiado para brindar explicaciones por el estado edilicio de las escuelas, entre otros puntos. Y el trámite dado por la comisión de Asuntos Constitucionales de la Legislatura volvió a evidenciar la ruptura entre el espacio afín al mandatario provincial y quienes responden al vicegobernador Osvaldo Jaldo.

La Legislatura avanza con la interpelación a Lichtmajer por el estado de las escuelas

A través de sus redes sociales, el intendente manzurista Javier Noguera (Tafí Viejo) salió en respaldo de Lichtmajer con un duro mensaje referido a la interna justicialista.

"Vemos con gran preocupación la consolidación en plena pandemia de la alianza política de macristas y jaldistas con el único propósito de desestabilizar al Gobierno provincial", expresó Noguera. Y sostuvo que "afectar la gestión institucional del Estado por una interna política perjudica a todos los tucumanos". 

El jefe municipal acompañó su comentario con un tuit del vicepresidente primero de la Legislatura, el manzurista Gerónimo Vargas Aignasse, quien también había rechazado el pedido de interpelación dirigido a Lichtmajer.

"En la comisión de Asuntos Constitucionales se consolida el acuerdo político entre macristas y jaldistas para confrontar contra el Gobierno peronista de Juan Manzur", había expresado el ex diputado nacional. 

La polémica surgió ayer, cuando el comité parlamentario presidido por el jaldista Javier Morof resolvió por unanimidad darles curso a los pedidos de interpelación planteados por dos radicales aliados a Juntos por el Cambio, José Ascárate y José Canelada, en contra del ministro de Educación.

En el Poder Ejecutivo cayó como una bomba el avance contra Lichtmajer

Si bien todavía resta que el cuerpo colegiado someta a votación en el recinto el dictamen de comisión, la iniciativa volvió a abrir las aguas en el oficialismo, que había quedado fracturado el 8 de marzo, cuando el espacio del vicegobernador logró imponer a Eduardo Cobos como defensor del Pueblo, en lugar del manzurista Fernando Said Juri Debo.