Las acusaciones cruzadas coparon la escena de la política de Tucumán, luego de la grave denuncia del integrante del Tribunal de Impugnación del fuero penal, Enrique Pedicone, en contra del vocal de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán (CSJT), Daniel Leiva, por un presunto intento de influir en sus decisiones en una causa que investiga al legislador Ricardo Bussi por supuesto abuso sexual.

Según Pedicone, Leiva le pidió que "manejara la intensidad" de ese expediente ya que el líder de Fuerza Republicana era "funcional" al oficialismo. Incluso, según el magistrado, el vocal del alto tribunal afirmó que efectuaba ese pedido en nombre del gobernador Juan Manzur y del vicegobernador Osvaldo Jaldo, algo que ambos desmintieron. 

En medio de las tensiones, dos legisladores que responden al presidente de la Legislatura se manifestaron con relación al accionar del integrante del Tribunal de Impugnación.

"Solicitamos al juez Pedicone que en forma urgente presente las pruebas que dice tener (N. de la R.: una supuesta grabación del pedido de Leiva). Es un hecho de tal gravedad institucional que la Justicia lo debe resolver rápidamente, sin dilaciones, por el bien de las instituciones", indicó el jaldista Javier Morof, presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales de la Legislatura.

El ex concejal, luego, cuestionó a Pedicone. "Hace dos días está en todos los programas, y no presentó tales pruebas. Por la integridad de la Justicia, acompañe los elementos para uqe se actúe dentro de los órganos pertinentes y se esclarezca cuanto antes este tema", sostuvo Morof.

EN EL RECINTO. Javier Morof, delante; Raúl Ferrazzano, detrás. Foto Prensa HLT / Archivo

El titular de la comisión de Legislación General, Raúl Ferrazzano, también se expresó en ese sentido. "Como legislador, como hombre del derecho y como ciudadano entiendo que, por la gravedad institucional de la denuncia de Pedicone, es importante para echar luz en esta causa que el camarista presente rápidamente las pruebas en su poder, para que, de esta manera, las autoridades judiciales intervinientes cuenten con todos los elementos necesarios", aseguró el jaldista.

Dardos desde el alfarismo

ENRIQUE ROMERO. Funcionario de Tránsito municipal. Archivo LA GACETA

También se sumó a la polémica el subsecretario de Tránsito de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, Enrique Romero, quien reprochó al legislador Bussi luego del cruce con el intendente capitalino, Germán Alfaro (PJS).

"Ricardito Bussi, por parecerse a Superman, se pone el calzoncillo arriba del pantalón. Siempre supimos que su rol político era ser funcional a la tarasca y ahora el 'pristino jurisconsulto' amigo de Jaldo y vocal de la Corte, Daniel Leiva, habría manifestado la necesidad de protegerlo para que siga cumpliendo su rol de aliado parlamentario del bloque oficialista en la Legislatura. Lo cierto es que la aptitud funcional y la vocación democrática del vocal ha quedado en duda y bajo sospecha; pero la vocación morralera de Bussi quedó expuesta y blanqueada", sostuvo el funcionario municipal.

El alfarista cargó duramente contra el líder de FR. "Lamentablemente, el travestismo político de Ricardito y en nombre de un pragmatismo grosero, carente de principios, su ideología es una mera etiqueta para seducir a incautos. Lo que asombra no es tanto la incoherencia criminal de ser un saltimbanqui, sino la frecuencia con la cual lo comete: así fue hijo putativo de (José) Alperovich, declaró la necesidad de la reforma para luego de decir que Jaldo era un gran demócrata porque lo recibía, y cambió de actitud. O cuando intentó pegarse a los intendentes (Mariano) Campero primero, y a (Roberto) Sánchez después", fustigó Romero.