El colapso de la estrella anticasta marca el ritmo del último tramo de las elecciones parlamentarias del 26-O. Javier Milei siente el impacto del ruido político que derivó en un escándalo por presuntas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad. Más que el Presidente, el caso golpeó a su hermana, “el jefe”, Karina Milei. Las explicaciones sobre qué sucedió no son convincentes tanto como las dudas que están rondando por las mediciones del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). Particularmente, por la inflación que, según la visión oficial, sigue bajo control, pero, según la calle, golpea tanto como la falta de efectivo y la pérdida de poder adquisitivo. No hay dinero; no hay dólares; la tarjeta está reventada y el crédito se fue hasta la estratósfera con las elevadas tasas de interés. En poco más de un mes, el rendimiento del plazo fijo subió cerca de 15 puntos y, en la actualidad, hay bancos que ofrecen tasas del 50% anual para captar los pesos que todavía están fuera del sistema. El endeudamiento familiar crece. El equipo que conduce el ministro de Economía Luis “Toto” Caputo está decidido a secar la plaza de pesos, con el fin de evitar que ese efectivo se dolarice o, lo que es peor para una gestión en un año electoral, recaliente la inflación.
La supernova libertaria transita entre una economía que se enfría y los escándalos políticos. La semana arrancó con malas noticias para la Casa Rosada. El Índice de Confianza en el Gobierno (ICG), que elabora la Universidad Torcuato Di Tella alcanzó este mes el nivel más bajo de la gestión de Milei. Concretamente, el ICG cayó 13,6% respecto del mes anterior y acumula en lo que va del año una pérdida de 20%. La baja mensual fue generalizada entre los cinco componentes del índice: la Honestidad de los funcionarios retrocedió 9,9%; la Capacidad para resolver los problemas del país 14,6%; la Eficiencia en la administración del gasto público 13,2%; la evaluación general del gobierno 12,8%; y la preocupación por el interés general 18,2%. Con este resultado, el nivel de confianza actual es 16,3% menor al de la medición de agosto de 2017, durante la gestión de Mauricio Macri, y 14,3% mayor al de agosto de 2021, bajo el gobierno de Alberto Fernández.
En las provincias tratan de que las esquirlas no dañen la imagen de los gobernadores. Cada uno atiende su juego. Y gran parte de ellos mira lo que puede suceder en la contienda bonaerense. Ese será el indicador claro acerca de cuánto puede golpear los escándalos en la perfomance electoral del presidente de la Nación. Los mercados también siguen muy de cerca los acontecimientos. Nadie pone un cobre hasta tanto aclare el panorama. El “wait and see” (esperar y ver) reina entre los inversores.
El gobierno de Javier Milei sube los encajes para sacar los pesos de la calleEl big bang electoral es evidente. Hay una miniliga de gobernadores que trata de hacer sus primeras armas en octubre, pero mirando a 2027. El bloque se denomina Provincias Unidas. Sin embargo, ese ramillete de dirigentes no logra convencer al resto de que es una propuesta superadora a la casta que Milei combate. Las conversaciones ya no son tan frecuentes como hace un mes. El Gobierno nacional no tiene la fortaleza suficiente para imponer agenda para las reformas estructurales. El individualismo reina. Cada uno atiende su quinta.
Osvaldo Jaldo sigue de campaña en Tucumán. Un mes antes de las elecciones de medio turno tendrá la última encuesta en la mano, la que definirá el discurso del último tramo de la campaña proselitista. En el búnker oficialista velan las armas. La atomización opositora despierta el optimismo en el Frente Primero Tucumán. Más allá de las impugnaciones a la candidatura testimonial a diputados del gobernador, en la Casa de Gobierno sostienen que no hay argumentos jurídicos que eviten la postulación del tranqueño. “No hay que hacer ninguna demás”, le sugieren al mandatario. Las carpetas sobrevuelan; todos se agazapan. La ofensiva en el discurso choca con la defensiva en la acción.
Impugnan en la Cámara Electoral la candidatura de Jaldo a diputado y la tildan de inconstitucional y "testimonial"Las candidaturas testimoniales no implican pérdida significativa de votos. El electorado se apega a las tendencias y afinidad según sus necesidades inmediatas. Los resultados históricos demuestran que la estructura partidaria sostiene el resultado, advierte el analista Santiago González Díaz. Según el experto, el mayor desafío de las elecciones intermedias no es solo la falta de recursos o visibilidad, sino la percepción generalizada de que no está en juego nada decisivo. “Cuando no se construye un antagonismo claro -alguien a quien frenar o algo que defender-, se debilita la coordinación anticipada y cae la concurrencia”, dice el diagnóstico que González Díaz elaboró junto con Sofía Delina Eijo. El objetivo oficial es captar la mayor cantidad de votantes. A mayor cantidad de electores, más posibilidades tendrá el aparato justicialista para desplegar toda su estrategia y logística más allá del cambio del sistema para sufragar.
Altas tasas
La realidad económica asusta. La reactivación económica está lejos de concretarse. Entre el dólar y la inflación están las altas tasas. Las promesas de financiamiento federal brillan por su ausencia. Milei está más abocado a preservar el ancla fiscal que a atender la demanda de los gobernadores. Los mandatarios provinciales hace rato que no hablan con los funcionarios nacionales. No hay respuestas; tampoco intenciones de modificar las relaciones. Jaldo ha vivido, en carne propia, la incertidumbre del poder central cuando la semana pasada tuvo que instalarse en Buenos Aires para seguir de cerca los debates en el Congreso. Fue un verdadero partido de ajedrez en el que los tres integrantes del bloque Independencia se movieron primero como peones, pero luego salieron disparados como alfiles. Guillermo Francos, el jefe de Gabinete de la Nación, ya no tiene argumentos para sostener una charla con los gobernadores. No hay otros interlocutores. Para el 26 de octubre falta una eternidad. Las reformas estructurales que plantea el Gobierno nacional dependerán, en gran medida, del resultado de los comicios de medio turno. Hablar de modificar el esquema de reparto de la coparticipación suena utópico en la medida que la Nación no ceda parte de la torta primaria. Los empresarios y los industriales vuelven a plantear que es fundamental reducir la carga tributaria, una llave que puede abrir las puertas a las modificaciones estructurales en materia impositiva y laboral.
La política de la casta y de la anticasta enfrenta sus propios fantasmas. En el Gobierno nacional, puntualmente, hay tres crisis simultáneas, al decir del experto en Comunicación Política, Mario Riorda: decepción con la gestión, evidencia de conductas de corrupción y mala gestión. Todo ante un cuádruple juicio en tiempo real: el de la ciudadanía, el de los medios, el de la oposición y el de la Justicia.
Caputo aseguró que la suba de tasas es transitoria pero que podría resentir la actividad comercial a corto plazoLas elecciones que se vienen van más allá de la renovación parcial de las bancas en el Congreso de la Nación. Constituirán más que un test de gestión, en los tres niveles de Gobierno. Milei tiene la obligación de modificar el humor social para continuar con la motosierra. Los gobernadores -entre ellos Jaldo- deberán reivindicar los liderazgos en sus territorios como fortaleza para el segundo tiempo de sus mandatos. Algo similar les ocurrirá a los intendentes. Frente a tanta acumulación de problemas, nadie puede sacar los pies del plato; todos deben contribuir a ser parte de la solución.