Mecha, la tucumana que cumplió 80 años y sigue revolucionando Termas de Río Hondo

Mecha, la tucumana que cumplió 80 años y sigue revolucionando Termas de Río Hondo

Mes de la mujer.

 Mecha recordando, entre risas, algunas anécdotas durante la entrevista. "Mecha" recordando, entre risas, algunas anécdotas durante la entrevista.
18 Marzo 2023

“Nunca pude quedarme quieta” es lo primero que nos dice Mercedes Neme cuando le  preguntamos cómo era de pequeña. Esta mujer tucumana, arquitecta, empresaria, madre y  abuela, acaba de cumplir 80 años y sigue con la misma impronta. Es cerca del mediodía y “Mecha” -como la conocen todos- llegó al hotel a las 7 para supervisar las tareas de  remodelación. Mientras la entrevistamos, nos da una muestra clara de su permanente  multitasking: habla con los electricistas, atiende una llamada de su nieta a la que promete llevarle unas Oreos, revisa las obras de las nuevas piscinas de agua termal y, con suma atención  sobre los detalles, corrige la colocación de un mármol en el nuevo lobby.

“La rutina no es lo mío, siempre busqué cómo innovar”, nos cuenta esta hija menor de ocho hermanos que vino al mundo cuando su madre tenía 43 años. “Me crio Rica, mi hermana  mayor, me llevaba 18 años”, recuerda emocionada. Rica falleció hace un mes y fue su principal soporte económico cuando decidió estudiar arquitectura, en tiempos donde las familias impulsaban a sus hijas a seguir carreras más blandas. Mercedes vivió esta resistencia por  primera vez en su adolescencia. 

Con la idea clara de que le gustaban los negocios, quiso  ingresar en la Escuela de Comercio, pero su madre se opuso terminantemente. “Entonces me  recibí de maestra ¡pero odiaba enseñar!”, nos suelta con una carcajada, la misma que contagia  cada vez que relata las circunstancias que fue superando para perseguir sus sueños. En el  transcurso, para disponer de independencia económica, tejió pulóveres, bordó manteles y trabajó en Casa Jorrat durante los veranos. “Arquitectura no es una carrera para mujeres,  estudiá filosofía” le repetían después. Mecha, motivada por sus sobrinos que tenían casi su  misma edad, aprobó el curso de ingreso y en cinco años ya era arquitecta. “Yo entendía que, si  mi hermana me estaba manteniendo, no podía darme el lujo de perder tiempo” afirma.

Hace una pausa, y entre materiales y decenas de personas que trabajan intensamente para  terminar las obras, Mercedes revisa planos y los diseños de la nueva papelería del hotel. El  Hostal del Abuelo es ahora el HDA Hotel + Spa All Inclusive. Este tradicional hotel cuatro estrellas de Termas de Río Hondo tampoco se queda quieto. Abrió sus puertas por primera vez  en 1979 como un residencial y fue creciendo junto con la evolución de la ciudad, su  movimiento turístico y la demanda de los huéspedes. Debe su nombre original a su ideador,  Don Miguel Mukdise, suegro de Mercedes y abuelo de sus hijos.

“Las Termas ha crecido muchísimo. Ya no son sólo los abuelos, es la juventud, las familias, los  deportistas, los grupos de amigas y amigos, los que nos visitan. Antes abríamos en mayo y  cerrábamos en octubre, pero ahora trabajamos todo el año, a lo sumo cerramos un mes para  mantenimiento, pero bueno… ahora fue un poquito más”, explica mientras nos lleva en un  recorrido por la obra. ”Si bien nunca paramos de hacer cosas nuevas en el hotel, el año pasado  sentimos que debíamos plasmar todo este proceso en la marca, en el nombre del hotel que  había quedado desactualizado, pero sin perder nuestro ADN que es la familia, la cercanía y  calidez que hace que nuestros huéspedes se sientan como en casa” dice, mientras nos sacudimos el polvillo y la perseguimos hacia el sector de las nuevas piletas que están casi listas. Ella nos va mostrando todo con mucho orgullo, “estoy nerviosa, la ansiedad me domina”, se ríe, rodeada de su equipo que está a full preparado cada detalle para la reapertura que será tan  sólo en una semana.

Pero ¿cómo y cuándo llegó Mercedes a Termas?

“En la facultad conocí a Gody, que estaba de novio con una chica muy linda. Pero mi suegra no  la quería” larga con la picardía de la edad y el conocimiento de cómo sigue la historia. Gody es Miguel Mukdise, su esposo, santiagueño y también arquitecto. “Yo era muy amiguera, tenía 21 años y algunos candidatos, incluso un profesor. En ese tiempo los estudiantes de arquitectura éramos pocos y todos amigos. Cuando mi mamá conoce a Gody, me dice ¡ese es el candidato! Y tiempo después, me conoce su mamá ¡y le dice a él lo mismo!”. Mecha vuelve a reír con  todas sus ganas y entonces nos cuenta que noviaron, se recibieron y se casaron en 1968.

Mecha por fin se sienta, es hora del almuerzo y el calor de la siesta pega fuerte. El ritmo de la  ciudad se va apagando, pero en el hotel todos siguen su música de amoladoras, martillos,  voces y una guaracha que suena por ahí. Ahora nos habla de su suegro con mucha admiración  y reconocimiento, “mi suegro, Don Miguel, llegó de Siria a Vinará sin nada, y sentía un  profundo agradecimiento hacia la ciudad que le permitió trabajar, crecer y solventar la  universidad de sus hijos. Entonces tenía la consigna de que la plata de Termas se debía quedar  en Termas. Cuando nos casamos con Gody, nos dijo que viniéramos a vivir y a trabajar aquí” relata, poniendo en claro un mandato familiar que sigue hasta hoy: devolverle al terruño todo  lo que les ha permitido lograr.

Así comenzó su historia de amor y de familia, de tres hijos, nueras, doce nietos, trabajo en  equipo con su marido y una vida muy comprometida con la ciudad que la recibió primero en la  casa de sus suegros y luego en el hogar que pudieron construir juntos. Mercedes continuó con  su profesión. En las obras ella proyectaba y Gody se ocupaba de la construcción, pero cuando  los convocaban para proyectos públicos, donaban su trabajo profesional a la comuna.  Proyectaron nuevas escuelas, plazas y hasta la residencia estudiantil donde Mecha, además de  ir haciendo ampliaciones y mejoras, limpiaba y cocinaba para los chicos del interior que  llegaban a la ciudad a hacer su secundario.

Familia completa en los festejos de los 80 años de Mecha. Familia completa en los festejos de los 80 años de Mecha.

La escuchamos, atrapados en sus relatos y anécdotas. Es una mujer que vivió mil vidas en una, con una energía y resiliencia admirable. “Ser mujer nunca me detuvo para nada” dice y nos cuenta cómo fue la llegada de cada uno de sus hijos: Miguel, Jorge y Marcos. Habla de ellos con gran orgullo. Los crio con mucha ayuda de la familia, mientras iniciaba nuevos emprendimientos, como una vez que compraron una panadería y cada día, a las cuatro de la mañana, iba a hornear el pan.

A la arquitectura y los negocios, le sumó la función pública. En los años 70, fue secretaria de Obras Públicas y logró evitar que la ciudad perdiera los fondos destinados a la construcción de la Escuela Técnica: en cinco meses levantó aulas, equipo de baños y tinglado y luego terminó la obra de la terminal. Con esa misma impronta, tuvo un rol preponderante cuando su esposo  asumió como intendente de Termas en el 2014. Habían pasado sólo unos meses desde que  recibieran el golpe más duro de su vida: Miguelito, su hijo mayor, murió días antes de asumir como intendente electo. Mecha sublimó este profundo dolor en más compromiso social. Vivió  el duelo al lado de su compañero para darse fuerzas y avanzar juntos en el legado que ambos  sentían, les había dejado también este hijo: trabajar por Termas y su gente. Sabemos que luego  también superó un cáncer, pero Mecha no lo menciona, no lo tiene en su cabeza, no se  victimiza, habla siempre de las cosas buenas.

Suena su teléfono, nos aclara que esta vez es Gody recordándole que aún no almorzaron y la  está esperando afuera. Sospechamos que es su manera de obligarla a tomar un descanso.  Acordamos verla a la tarde para terminar la entrevista, cuando baje el calor, como dándole tiempo para una siesta tardía. Una hora después suena nuestro teléfono, es ella que ya volvió  al hotel y nos espera con un café. Tiene alma de gran anfitriona, está pendiente de lo que  necesitamos y nos pregunta si estamos cansados, “un poco” pensamos, pero la vergüenza nos  impide reconocerlo ante esta mujer que arrancó a la madrugada y sigue ahí.

Nuevo sector de piscinas termales, render del proyecto sobre el que Mercedes trabaja contra reloj. Nuevo sector de piscinas termales, render del proyecto sobre el que Mercedes trabaja contra reloj.

Esta vez no podemos hacerla hablar de sí misma, vuelve con pasión al proyecto que la ocupa.  Nos lleva a ver el gran espacio en el que funcionará el nuevo restaurante del HDA, al que  decidió llamar Don Miguel. “Quizás logremos terminarlo a fin de mes”, dice. “¿De este mes?” le  preguntamos un poco perplejos, “si, es que también seguimos innovando sobre la experiencia  all inclusive del Hostal” -se le escapa- “del HDA ahora ¡jaja!” corrige rápidamente. 

“¿Saben  qué? los huéspedes aman nuestra cocina de autor y queremos que los sabores se disfruten en cada momento que la gente está en el hotel. Cuando hablamos de all inclusive nos referimos a  esto, a una experiencia completa, de los cinco sentidos, envolvente, de bienestar físico y  mental. Porque renovarse es enriquecerse con lo nuevo, materiales, conceptos, tecnología,  pero sin dejar de abrazar el pasado, la historia, la identidad, los orígenes” nos recalca.

 Nuevo lobby HDA. Nuevo lobby HDA.

La tarde va cayendo mientras volvemos a la sala de cine del hotel convertida en su oficinal  temporal. Mecha habla con su equipo acerca de cómo debe ser el recibimiento de los primeros  pasajeros que lleguen a la reapertura durante el fin de semana largo del 24, el MotoGP y  Semana Santa… Los teléfonos siguen sonando y entre ellos, vemos un reconocimiento que  tampoco mencionó: fue distinguida por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa como Mujer Empresaria CAME 2022, un reconocimiento nacional a la trayectoria de la mujer  empresaria y los proyectos que incentiven la actividad PYME.

Nos despedimos con muchas ganas de regresar en pocos días para disfrutar del HDA renovado.  Nos llevamos la certeza de que Mecha vuelve a nacer con cada proyecto que emprende. Nos  ha revelado su pócima, el secreto, la receta de cómo cumplir 80 años tan apasionadamente  vívidos.  

El Hostal del Abuelo se renueva en HDA All Inclusive Hotel + Spa. El Hostal del Abuelo se renueva en HDA All Inclusive Hotel + Spa.

Si, “vívidos”, no quite la tilde señor corrector. A decir del diccionario: “Que tiene una gran  fuerza y claridad, como si estuviera ante los ojos o estuviera sucediendo en ese momento”.

Esta nota es de acceso libre.
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