“Decanos” y “santos” usaron casacas no tradicionales

Atlético jugó con una camiseta roja, negra y blanca. San Martín usó la casaca de Talleres de Tafí Viejo.

EQUIPO. Los jugadores posaron frente a los fotógrafos con colores no tradicionales para Atlético, como los que viste el nene a la derecha.  EQUIPO. Los jugadores posaron frente a los fotógrafos con colores no tradicionales para Atlético, como los que viste el nene a la derecha.

La historia de los clubes de fútbol se jalonan con triunfos, campeonatos, goleadas históricas y también derrotas que quieren olvidarse. Hay jugadores que dejan su huella en los hinchas. Pero algo que no se olvida, que identifica a fuego son los colores de la camiseta del club de sus amores. Esos colores dan un sentido de pertenencia, aglutina a todos detrás de esa divisa e identifica a quienes la usan. Si hablamos de celeste y blanco sabemos que es Atlético o Concepción, el rojo y blanco es de San Martín, All Boys, Bella Vista y algunos otros; el negro y amarillo nos lleva a Tafí Viejo en busca de Talleres o el rojo, negro y blanco (el tricolor) nos recuerda a La Florida o Amalia. Como vemos los colores identifican al hincha y a la institución, pero a veces ocurre que nuestro equipo no puede usar sus colores tradicionales y debe usar otra camiseta. En el presente existen las alternativas que en muchos casos logran un fuerte impacto y son muy solicitadas.

En esta ocasión vamos a recordar partidos donde los protagonistas por tener los mismos colores, uno de ellos debía cambiar de casaca para una mejor identificación en el campo de juego. Y en aquellos tiempos el local era el que debía cambiarse, quizás por gentileza o por tener la utilería más cerca. Se estaba definiendo el torneo Nacional de 1975. De aquel certamen fueron participantes Atlético y San Martín. El santo quedó fuera en la primera parte mientras que el decano alcanzó una plaza para la fase final.

Los albicelestes fueron primeros en su zona clasificaron junto a San Lorenzo. Mientras que en la zona de los albirrojos los clasificados fueron River Plate y Estudiantes de La Plata, quienes fueron los protagonistas del certamen al ser campeón y vice. Los otros fueron Rosario Central, Gimnasia de Jujuy, Talleres y Temperley. Los encuentros que disputaba Atlético de local eran en cancha neutral y por ende se jugaban en la Ciudadela.

Fase final del Nacional

El primer encuentro de la fase final colocó a los tucumanos frente a los azulgranas, quienes ganaron 4 a 0. En la segunda fecha jugó en Banfield contra Temperley con quien empató en un gol. Llegamos a la tercera fecha, el decano volvía a jugar en la Ciudadela y enfrentaba a Gimnasia de Jujuy. El partido se jugó en la noche del 10 de diciembre de 1975. En esa jornada los albicelestes locales, ya que los jujeños tenían y tienen los mismos colores, debían cambiar de camiseta. Llega la hora de inicio y nada. El estadio lleno y expectante. De acuerdo al relato de Héctor Alberto Díaz, hincha y seguidor de la historia decana, “yo era chico estábamos en la cancha con mi papá y el partido se demoró en comenzar como media hora”. Quizás la demora se haya debido al hecho que Atlético salió al campo de juego con una camiseta con colores muy diferentes a los acostumbrados. Esa noche lucieron una casaca tricolor en rojo, negro y blanco. De acuerdo a los datos aportados por Sebastián Lampasona, historiador de Atlético, “no encontramos cual fue el motivo ya que como alternativa usábamos la del escudo quizás esa también fuera muy parecida a la de los jujeños” y agrega que “creemos que era una camiseta genérica y no de un club en especial. Aunque Amalia jugaba por entonces en la Federación con una similar quedará para la historia que Atlético jugó con la camiseta de Chacarita”. Algunos otros memoriosos dicen que la que se usó era de La Florida que tiene colores similares. Bueno hecho estas salvedades debemos tener en cuenta que como en el fútbol las cábalas y mufas son parte del folclore, el cambio se hiciera para superar la mufa ya que los encuentros se jugaban en cancha de San Martín y en la primera fecha se perdió 4 a 0. Al parecer el cambio rindió sus frutos ya que los tucumanos derrotaron 3 a 1 a los jujeños. Fue su primer y único triunfo en esa fase del torneo que coronó a River.

EN 1977. Ignacio (der) hace el gol santo que es anulado. EN 1977. Ignacio (der) hace el gol santo que es anulado.

Equipo

El equipo que entró a la cancha con la camiseta tricolor fue Ruiz al arco; Milicay, Guerrero, Solórzano y Bulacio en el fondo; Castro, Espeche y Villa en el mediocampo y en el ataque Dominé, Agüero y Ghiso. Los goles fueron convertidos en el primer tiempo por Castro a los 9 minutos y Ghiso a los 40 para los decanos. En el complemento Fernández, a los 15, descuenta para los jujeños y a los 45 Castro pone cifras definitivas. De acuerdo al comentario de nuestro periodista Atlético comenzó como una “tromba futbolística” pero ese equipo “inspirado, lujoso y avasallante” dejó paso en el segundo tiempo a Gimnasia que “sin llegar jamás al nivel del rival comenzó a inquietar a Ruiz” aunque al ponerse 2 a 1 hizo que los locales ajustaran un poco sus líneas para evitar sobresaltos.

Sin el rojo y blanco

Como vimos Atlético tuvo que usar una camiseta de colores bastante diferente a los tradicionales y su eterno rival, San Martín, hizo lo propio en 1977 en la disputa del encuentro contra Bella Vista jugado en la Ciudadela por el Anual. El santo y Bella Vista tenían y tienen los mismos colores, rojo y blanco, por ello los primeros debían cambiar de camiseta. Aquel 24 de abril los hinchas albirrojos locales vieron ingresar a su equipo con colores muy diferentes, negro y amarillo. La casaca era similar a la de Talleres de Tafí Viejo, no se sabe a que se debió y si había alguna camiseta alternativa que no se usó.

Este cambio por parte del santo no fue tan beneficioso como para Atlético, mientras que los decanos ganaron su encuentro los de la Ciudadela cayeron 1 a 0 con el equipo del sur. Los “cirujas” ingresaron a la cancha con Maguna en el arco; Salinas, Díaz, Kholl y Moreno en el fondo; Cortes, Marchese y Pereyra en el medio y en el frente Martínez, Roldán y Sánchez. Por el lado de Bella Vista fueron de la partida Valdivieso al arco; Vélez, Salguero, Quiles y Juárez en la defensa; Perdiguero, Ortíz y Ferreyra en el centro del campo y en el ataque Gaitán, M. Herrera y L. Herrera. El catamarqueño Ferreyra “erigido en el mejor exponente del ganador, logró a los 12 minutos del primer tiempo de tiro penal, el único gol del cotejo, que le significó al local la pérdida de su condición de invicto”. El santo no pudo concretar y su accionar hizo que los visitantes, por ciertas faltas fuertes, quedaran en minoría. Se fue Herrera, que había reemplazado Ferreyra, por falta fuerte sobre Marchese. A los 38 minutos, más con ímpetu que con juego colectivo, Ignacio (había reemplazado a Martínez) logró el empate que fue anulado por el árbitro Guillermo Fernández por posición adelantada. Y Pacheco cuando se terminaba el encuentro estrelló la pelota en un palo. Finalmente los visitantes se alzaron con el triunfo y el santo dejó su invicto vistiendo otros colores a su tradicional albirrojo.

Finalmente, podemos recordar que River en su visita a nuestra provincia en diciembre de 1944 vistió la casaca de San Martín y de Atlético Concepción en el encuentro que disputó con el seleccionado de la Federación. La decisión millonaria fue un reconocimiento a los clubes anfitriones de los porteños y es actitud fue muy festejada por el público.

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