El “Santo” de la esperanza

El “Santo” de la esperanza

Con “Tino” en cancha, las posibilidades se multiplican.

El “Santo” de la esperanza
13 Julio 2022

El diccionario futbolero define al crack como el jugador excepcional, cuyas habilidades innatas para el juego lo ubican en una categoría superior al promedio. Precisamente, crack es una onomatopeya que hace referencia a una normalidad que se rompe ante la aparición de alguien distinto. Y si hay un jugador en San Martín al que ese traje le queda pintado es a Alberto Costa, el titiritero que maneja los hilos del juego dentro de la cancha, mientras Pablo De Muner lo hace desde afuera.

Contra Santamarina, “Tino” volvió a demostrar lo que a estas alturas ya es una obviedad grande como La Ciudadela: cuando está él dentro de la cancha, las posibilidades de San Martín se multiplican. Cuando no está, el equipo lo siente, tanto en la generación de juego como de oportunidades de gol. Él mismo aportó de penal uno de los cuatro que sellaron la goleada del lunes por la noche, aunque ya en el primer tiempo había estado cerca de inflar la red con un furioso remate que se fue apenas por encima del travesaño.

Si hasta hoy San Martín sostiene la esperanza de darle alcance al imparable Belgrano, mucho tiene que ver la influencia del número 8. “Qué feliz se siente uno en esta cancha y con esta gente”, se sinceró en sus redes sociales. “Tino” no pierde ocasión de recordarle a los hinchas lo que ellos ya saben: que a la camiseta roja y blanca la siente en serio. Y por eso no dudó en resignar dinero y pegar la vuelta cuando supo que al “Santo” lo habían despojado de lo que era suyo. A sus 37 años, y con larga experiencia en el fútbol europeo, sigue en busca de una ilusión: conseguir el ascenso a la Liga Profesional. El propio Costa aseguró que cumplir ese anhelo sería un lindo broche de oro para su carrera. Al menos, como futbolista. Aunque en la opinión de muchos hinchas, el “Comandante” ya es un hombre de la casa y debe quedarse, como jugador o como lo que sea.

Pero ya habrá tiempo de pensar en el después. Por ahora, hay un “Pirata” al que atrapar para soñar con el ascenso. Y con “Tino” en cancha, todo es posible.

Comentarios