Artistas y canciones se abrazan solidarios en el “Patio hermano” de Gustavo Guaraz

Artistas y canciones se abrazan solidarios en el “Patio hermano” de Gustavo Guaraz

El folclorista y un numeroso grupo de cantores, músicos y bailarines presentarán el disco colectivo que grabaron a beneficio del hospital de Humahuaca, durante la pandemia.

COMPOSITOR. Gustavo Guaraz escribió más de un centenar de temas. COMPOSITOR. Gustavo Guaraz escribió más de un centenar de temas.

Fiel a su vocación de juntar a los amigos músicos para componer, cantar y compartir momentos de hermandad artística, el folclorista Gustavo Guaraz presentará hoy a las 20, en el Teatro San Martín (avenida Sarmiento 601) el disco colectivo “Patio hermano” y el libro “Barro” de su autoría, un proyecto que nació durante la pandemia y estuvo destinado a reunir fondos para el hospital de Humahuaca.

Bajo la dirección artística de Quique Yance y Lucho Aragón, acompañados por Café Valdez, Manolo Salguero, Martín Jiménez, Carla Guzmán y Guaraz, los artistas presentarán los temas del disco. Participarán Claudio Sosa, Noelia Scalora, Los Juan, Sofía Ascárate, La Yunta, Francisco Santamarina, Noralía Villafañe, Chakana, Mariela Narchi, Guadalupe Aguilar, Dardo Solórzano, Álvaro Rodríguez, Juanest Rodríguez, Carolina Villafañe, Candelaria Guaraz, Marta Lafuente, María José De Mari, Carla Guzmán, Juan Pablo Castillo, Matías Coronel, Nazareno Lechessi y Juan Manuel Palacios. También se presentarán los bailarines Caly Bielik, Carolina Lozano, Ana Darelli, María Julia Álvarez, Marcela Royo, Daniel Pascual, Pedro Costas, Tanio Kikano y Lucas Díaz Fasola. Además, acompañará el espectáculo el artista plástico Jorge Missart pintando en vivo.

“Está llegando Claudio Sosa a participar de esta serie de espectáculos que vamos hacer acá en Tucumán, en San Salvador de Jujuy, en Humahuaca y en Tilcara, donde vamos a presentar el disco y entregarlo a los que compraron. Otro amigo, el Negro Medrano, también viene a cantar una vidala que hemos compuesto juntos”, anunció Guaraz en diálogo con LA GACETA.

-¿Cómo surgió la iniciativa de este disco colectivo?

- Yo estaba solo en mi casa de Humahuaca, haciendo las ofrendas de la corpachada (ceremonia de culto a la Pachamama), conectado por internet con amigos y mi hija, que estaban en Amaicha. Era una corpachada virtual en medio de la pandemia. Yo decidí ofrendar mis canciones y que sean de utilidad para el pueblo donde estaba viviendo. Muchos amigos se fueron sumando a la propuesta mía de que vendamos un disco y un libro con mis canciones, a través de internet, y que lo recaudado vaya al hospital de Humahuaca. A su vez, que hagamos un homenaje a todo el personal de salud que está ofrendando su vida para cuidar a la gente enferma. Junto con todos estos artistas que se sumaron, algunos desde otros lugares del país y también desde el extranjero, llegamos a grabar 50 canciones para el disco. Lo vendimos y juntamos $ 90.000.

- ¿Qué destino le dieron a los fondos?

- La directora del hospital utilizó ese dinero para acondicionar una sala de aislamiento para los pacientes de covid, donde se pudieron salvar vidas durante el rebrote de la enfermedad que se produjo después de carnaval. Ella nos mandó un agradecimiento. Uno de los casos que conocí fue el de doña Clarita, cuya familia vive en La Hornadita y tiene un proyecto de turismo comunitario. A ella le dio coronavirus y estuvo muy mal, una semana inconsciente. No quería irse a Jujuy, así que la familia la internó en el hospital Belgrano, de Humahuaca, y justamente estuvo en esa sala nueva. Ahí se pudo recuperar.

ACOMPAÑADO. El organizador de la velada convocó a un grupo grande de amigos para el recital de esta noche en el teatro San Martín. ACOMPAÑADO. El organizador de la velada convocó a un grupo grande de amigos para el recital de esta noche en el teatro San Martín.

-¿Los temas son todos suyos?

- Sí. Muchos fueron hechos con otros músicos. Yo tengo 100 canciones mías seleccionadas para el disco, pero grabamos 50. Es un trabajo colectivo donde ha trabajado mucha gente. Por ejemplo, el pianista Leo Toledo Plaate, que vive en un barco, participó mandando pistas por internet cada vez que podía bajarse en algún puerto. También participaron el guitarrista Darío Acosta Teich, que está en Nueva York, y Javier Núñez desde México. Entre ellos armaron un tema de jazz tremendo, junto con músicos de aquí como Lucho Aragón y los changos de Luneros. Todo el mundo ha participado con mucha alegría en esta iniciativa.

-¿Cuáles son los temas suyos que más le dieron satisfacciones?

- “Prendida en mi alma”, “Volverte a ver”, “Flor de lapacho”, son canciones que quiero mucho, pero la primera es la que más ha alcanzado popularidad. La hicimos con mi compadre Daniel Pascual, un día en que él se estaba por separar de la novia porque se iba a Alemania. Yo fui a saludarlo, nos tomamos unos vinos y nos pusimos a cantar. Fueron surgiendo los versos nuevos y la novia de mi amigo los escribía en los márgenes de las hojas de un diario, porque se había dado cuenta de que nosotros estábamos componiendo una zamba nueva. Fue a buscar un grabador y dejó registrado lo que nosotros cantábamos en medio de esa alucinación. Así salió “Prendida en mi alma”, que hoy se canta en todo el país. Tiene versiones de todo tipo. Muchas están en YouTube. Con el tiempo fui componiendo más temas y, sin darme cuenta, llegué a hacer más de 100 canciones. Yo no sabía que tenía tantas. Uno en el campo aprende que no se cuentan los cabritos...

- También hizo un tema dedicado a Gerardo Núñez.

- Sí. Yo había escrito una chacarera dedicada a él cuando estaba todavía internado, esperando que un día se despierte, la lea y se ría. Pero lamentablemente falleció. Un día nos juntamos con Manolo Salguero, Café Valdez y Lucho Aragón, nos pusimos a hablar sobre la filosofía de vida de Gerardo, sobre todo lo que nos había enseñado, sobre su obra, su legado. Esa noche le hicimos unos cambios a la letra que yo había escrito y quedó “Hermano Gerardo”, una chacarera compuesta por los cuatro. Yo tengo esa vocación de juntar a los artistas para componer, fomentando la creatividad de los más jóvenes. Hay gente que es muy capaz pero necesita un empujoncito. Eso es algo que heredamos de Gerardo. A “Flor de lapacho”, por ejemplo, la hicimos una vez que estábamos con Gustavo Páez, de La Yunta, en Buenos Aires, y lo llamamos al Paisa Romano, que tenía una letra. En otra ocasión juntamos un grupo de chicos músicos en Humahuaca y los ubicamos alrededor de un ceramista que trabajaba mientras nosotros componíamos. Así nació “Niños de barro”, un tema que canta La Yunta. Ha sido una experiencia extraordinaria.

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