Escalera a la plenitud

Escalera a la plenitud

Los clubes volvieron a la cancha, con nuevas reglas, pero también con más ganas que nunca.

IMPECABLE. Natación se quedó con el “Mocho Palou” 2021 tras superar en la final a un duro Universitario. Los “Blancos” mostraron que están en condiciones de estar entre los protagonistas del Anual tucumano, que comenzará en tres semanas. foto de Gustavo Martínez Ribó IMPECABLE. Natación se quedó con el “Mocho Palou” 2021 tras superar en la final a un duro Universitario. Los “Blancos” mostraron que están en condiciones de estar entre los protagonistas del Anual tucumano, que comenzará en tres semanas. foto de Gustavo Martínez Ribó
07 Marzo 2021

En la contundencia de los tackles y en la seriedad con la que los jugadores y jugadoras afrontaron lo que en el fondo no eran más que torneos y encuentros de pretemporada se advirtieron las ganas que había por volver a jugar al rugby. Si bien se trata de una versión todavía descafeinada del deporte en términos de contacto, habida cuenta el tiempo de inactividad a causa de la pandemia, era el momento que todos los clubes y la misma Unión esperaban. El cómo y a quiénes favorecían los resultados era lo de menos: lo importante era volver a jugar. Y si bien se notó cierta incomodidad ante las nuevas reglas, dispuestas provisoriamente para reducir el grado y el tiempo de contacto físico, en términos generales se vieron pasajes de buen rugby entre equipos que vienen trabajando ya desde enero.

La actividad del primer fin de semana de rugby poscuarentena (exceptuando el torneo de rugby playa que se jugó a modo de prueba en Famaillá el mes pasado) se repartió en varias canchas de la capital. En Natación se abrió el calendario con el tradicional “Mocho Palou”, que tuvo como ganador al club anfitrión. Los “Blancos” se clasificaron a la final tras vencer 31-12 a Lince, y en el duelo por el oro superaron 17-0 a Universitario. Lawn Tennis completó el podio vencieron a los de Silvano Bores al 800 por 22-0.

Más allá de la competencia misma, lo llamativo de este regreso era ver hasta qué punto se adaptaban los equipos (tanto masculinos como femeninos) a las nuevas reglas, como la del scrum sin disputa -e inhabilitado como opción para reiniciar el juego- y principalmente la del tackle y la del ruck de “1 vs 1”, a fin de evitar el amontonamiento en los puntos de contacto. En ese sentido, los equipos masculinos tuvieron una dificultad notablemente mayor para limitar el contacto.

“Es que son reglas más propias del seven, donde hay mayores espacios. Es difícil que un jugador acostumbrado al rugby de 15 no tenga el instinto de mandarse al ruck”, explicó Federico Puerari, uno de los entrenadores de Universitario.

Efectivamente, en los encuentros femeninos que se disputaron ayer en Cardenales y en Corsarios hubo una mayor naturalidad en la implementación de las nuevas normas, ya que las mujeres están más acostumbradas a jugar seven (o en algunos casos ten a side), por lo que no se involucra tanta gente en los puntos de contacto. “No nos costó tanto porque somos equipos de salir jugando rápido”, comentaron las “purpuradas” Rita Cazorla y Belén Maroni, en referencia a su equipo y a su rival, Alberdi Rugby. Las sureñas ganaron el choque de juveniles, mientras que las de “Nales” se quedaron con el de mayores.

“Nosotros trabajamos siempre de acuerdo al rival que enfrentaremos y a la forma en la que se va a jugar. Y cuando supimos que se iba a jugar con estas reglas, nos pusimos a entrenar eso. Y creo que salió muy bien”, sacó en limpio Cristian Zelaya, entrenador de Alberdi Rugby.

En el encuentro femenino disputado en la nueva cancha de Corsarios, el que se impuso fue Tafí Viejo, por diferencia de tries. También participaron el club anfitrión, Liceo y Los Nogales. Este último, del rugby emergente, compitió bajo el formato de X Rugby.

Los equipos van preparando el terreno para el comienzo de la temporada, el sábado 27.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios