Por Valeria Totongi
22 Diciembre 2020
ALERTA. Los carteles con información están distribuidos por Londres. REUTERS
Argentina suspendió, preventivamente, los vuelos desde y hacia Gran Bretaña, cuando se conoció la noticia de la aparición de una nueva cepa de coronavirus en ese territorio. El último vuelo desde suelo británico llegó a Argentina ayer por la mañana, y sus pasajeros fueron informados de que debían cumplir una cuarentena de siete días, en medio de la alarma global disparada por esta variedad del virus, de veloz contagio.
No es el primer país que toma esa decisión, ni el único. En América Latina, Chile, Colombia y El Salvador tomaron medidas preventivas similares. Francia, Alemania y Suiza ya lo habían hecho la semana pasada.
En territorio británico, volvieron las restricciones a la vida social, justo cuando empezaba a verse “la luz al final del túnel”, a caballo de la campaña de vacunación lanzada el 8 de diciembre.
Desde ayer, se implementan medidas más estrictas en todo el país, y millones de personas que ya estaban en la en el nivel 4 de restricciones, ahora no podrán encontrarse en las llamadas “burbujas de Navidad”, con familiares cercanos, informó el diario británico “The Telegraph”.
A muchos los tomó por sorpresa y recibieron el anuncio de las autoridades sanitarias como un golpe emocional. Entre ellos, están María José Perelló y Matías Mathuk , un matrimonio de tucumanos que se instaló en Londres a fines de octubre.
“Fue de un momento para el otro, no venímos escuchando rumores de que esto pudiera pasar. De hecho, ya se podía salir a bares y restaurantes, con ciertos cuidados. Ahora volvemos al ‘total lockdown’, lo más estricto que tuvo Londres en lo que va del año”, lamentó María José.
Sin embargo, destacó, incluso en la más dura de las cuarentenas, en Gran Bretaña se permitieron las visitas “de burbuja”, es decir, entre miembros de una familia previamente elegidos, para evitar el aislamiento y “por salud mental”. Tampoco se suspende totalmente la actividad educativa. “Seguimos teniendo clases presenciales, lo que cambia es que los institutos pueden recibir menos gente por aula”, contó.
Su esposo, Matías, considera que -si bien es una decisión drástica, que además hace poco por mejorar la deteriorada imagen del primer ministro, Boris Johnson- las cosas podrían ir peor. “Pasa que, hasta ayer, podíamos ir a restaurantes, encontrarnos con amigos, había estadios abiertos. Ahora habrá que esperar porque están estudiando esta nueva cepa”, dijo. Lo que queda es la incertidumbre sobre cuánto durará el cierre.
Es que la velocidad con que se propagó la nueva variante del SARS-CoV-2 en el sur de Inglaterra puso a los investigadores a trabajar contrareloj para tratar de descrifrar la mutación y determinar cuál es su verdadero impacto. Las investigaciones ya arrojaron algunos datos, aunque aún hay muchos interrogantes.
Entre las cosas que sí se saben sobre la variante B.1.1.7 es que se transmite un 70% más rápido que la cepa ya conocida. De los nuevos contagiados de covid-19 en el Reino Unidos, el 62% presentó la nueva cepa del SARS-CoV-2. Ese dato indica que la mutación está reemplazando a las anteriores versiones del virus.
La nueva cepa se transmite a mayor velocidad, lo cual aumenta la tasa de contagios, pero no hay indicativos de que las infecciones sean más graves o más mortales.
No está claro dónde surgió. Sí se sabe que se detectó por primera vez en septiembre, en el sur de Inglaterra y que no es la primera variante del SARS-CoV-2.
Las variaciones en cualquier tipo de virus son frecuentes y la de este coronavirus que tiene al mundo sumido en una crisis sanitaria sin precedentes no es la excepción, según publican medios ingleses.
De hecho, el virus que se reportó por primera vez en la ciudad china de Wuhan difiere del que se puede detectar en la actualidad, en la mayoría de los lugares del planeta. El primer registro de la mutación del SARS-CoV-2 data de poco después de desatada la pandemia. En España también se detectó una variación que trascendió las fronteras de ese país. Y hay una variante en Sudáfrica, denominada 501.V2. a la cual los científicos siguen de cerca y que tiene características similares a la del Reino Unido.
También fue una mutación la que se detectó en granjas de visones en Dinamarca y llevó a las autoridades de ese país a sacrificar a cientos de miles de esos animales.
La nueva cepa podría haber surgido en un paciente británico o haber sido importada por alguien que llegó al Reino Unido desde un país sin mayor capacidad para controlar las mutaciones del coronavirus.
Los científicos consideran que pudo partir de un paciente con un sistema inmunológico debilitado que presentó las condiciones propicias para que el virus cambiara, según publicó el portal Público.es.
Una preocupación extendida entre la población es que la mutación del coronavirus pueda afectar a las vacunas. La respuesta que están dando los investigadores británicos vinculados con estos desarrollos es que, frente a determinadas variantes, las vacunas más avanzadas no deberían tener inconvenientes y funcionarían con la misma efectividad.
Advierten que, de todos modos, no hay que recostarse demasiado en esa posibilidad, porque hay mutaciones que podrían reducir la capacidad de prevenir la covid-19.
Con más precauciones: Estados Unidos vigila la variante de covid-19
Las autoridades sanitarias de Estados Unidos, el país más afectado en el mundo por el coronavirus, anunciaron que están monitoreando de cerca la nueva cepa de covid-19 que ha emergido en Reino Unido, y admitieron que no está claro si esta mutación había llegado a Norteamérica. “Estamos, por supuesto (...) estudiando esto muy cuidadosamente", dijo el doctor Moncef Slaoui, jefe del programa de vacunas covid-19 de Estados Unidos, al programa "Estado de la Unión" de la cadena CNN. Slaoui, asesor jefe del gobierno de Trump en la llamada operación "Warp Speed" sobre las vacunas y sus tratamientos, añadió que la mutación del Reino Unido es "muy poco probable" que sea resistente a las vacunas actuales, diciendo que: "No podemos excluirlo, pero no es un asunto ahora". La nueva variante británica ha movilizado a tomar medidas de bloqueo en Gran Bretaña y restricciones de viaje de sus vecinos europeos. (Reuters)
Preguntas y claves
La mutación es una constante en los virus. Entonces ¿qué hace especialmente preocupante a esta variación del SARS-CoV-2?
Qué se sabe de esta variante
Los virus mutan constantemente, pero lo que hace saltar las alarmas en este caso es la cantidad de mutaciones que se dan al mismo tiempo. La cepa, detectada en septiembre, tiene 22 cambios a la vez y algunos de ellos aumentan la capacidad del virus para infectar las células, por eso podría propagarse más rápidamente. Alarma porque, aunque no sea más letal, los hospitales podrían colapsar.
Qué tan rápido se expande
Esta nueva variedad está detrás del aumento de casos en el sur de Inglaterra. Los científicos que la estudian, creen que se propaga un 70% más rápido que la cepa conocida. En noviembre, esta cepa estaba detrás del 25% de los casos detectados en Londres. En diciembre, el 60% de los nuevos contagios se atribuyen a esta variante.
Puede afectar a las vacunas
Científicos avocados a la investigación de la enfermedad, consultados por la cadena BBC, creen que las vacunas ya desarrrolladas sí funcionarán. Las tres vacunas más avanzadas entrenan al sistema inmunológico para que ataque distintas partes del virus. Eso sí, si se producen demasiadas variaciones, las vacunas deberían adaptarse cada año, como se hace con la vacuna para la gripe.
Avances: el órgano regulador de europa autoriza la vacuna Pfizer/biontech
El regulador de medicamentos de Europa (EMA) aprobó el uso de la vacuna contra la covid-19, que fue desarrollada de forma conjunta por la firma estadounidense Pfizer y su socio alemán BioNTech. Tan pronto como la Comisión de la Unión Europea (UE) le otorgue la licencia, ya no habrá obstáculos para que comience la vacunación. En Alemania las primeras personas podrían ser vacunadas el 27 de diciembre. "Es un mérito científico histórico", dijo la directora de la EMA, Emer Cooke. La aprobación por parte de la Comisión de la UE se considera una mera formalidad y se presume que ocurrirá antes de Navidad. En Alemania, las entregas de vacuna aún debe ser examinadas, autorizadas y distribuidas por el Instituto Paul Ehrlich, según señaló el ministro de Salud, Jens Spahn. En un principio, serán vacunados los mayores de 80 años, el personal y los residentes de las residencias de ancianos. (Reuters)
Temas
Coronavirus
Lo más popular
