
EXILIO. Frida Kahlo fue una de las personalidades que recibió a Trotsky y a su esposa, a su llegada a México. archivo

Un pico para escalar terminó, hace 80 años, con la vida de uno de los hombres clave en la historia del siglo XX. El asesinato de León Trotsky, a manos del español Ramón Mercader, enviado por Josif Stalin (lider de la Unión Soviética) acrecentó su leyenda, expuso más -por si hiciera falta- la brutalidad del stalinismo y alimentó el sueño revolucionario de miles de seguidores.
El asesinato fue el momento cúlmine de décadas de persecución y de una política sistemática para borrar el nombre del revolucionario ruso exiliado.
Nacido bajo el nombre de Lev Davidovich Bronstein, en una familia de granjeros judeorusos, en 1879, en Ucrania, Trotsky se convirtió en un pivote en la revolución que derrocó al zar Nicolás y luego llevó al país a la primera experiencia comunista del mundo. Fue el segundo al mando del líder de la Revolución Rusa, Vladimir Illich Lenin y el enemigo más persistente que tuvo Stalin, a quien acusó de traicionar la Revolución Rusa.
Para poder asestarle el golpe mortal en su despacho de la casa de Coyoacán, México -donde se había exiliado con su esposa, Natalia-, Mercader hizo un trabajo de infiltración que inspiró obras del cine y la literatura.
“Lo que importa es el carácter simbólico de ese asesinato”, dice el escritor cubano Leonardo Padura, autor de “El hombre que amaba a los perros”, obra imprescindible sobre la vida de Trotsky y la de Mercader. “El Trotsky que Stalin ordena asesinar está más marginado que nunca, tiene menos poder que nunca, y sin embargo era una luz que Stalin necesitaba apagar”, reflexiona Padura.
Periodista, ensayista y fundador del Ejército Rojo durante la guerra civil que soportó la naciente Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), entre 1918 y 1921, participó de la fundación de la III Internacional o Internacional Comunista. Muchos de sus seguidores hoy se denominan trostskistas y se reconocen partícipes de la IV Internacional Socialista.
En su libro Historia del Siglo XX, el británico Eric Hobsbawm califica a Trotsky como “el más prestigioso y célebre de los herejes”.
Actividades por los 80 años del asesinato de León Trotsky







