Censuran las obras de Egon Schiele en Berlín y en Londres

“Hay que entrar con cuidado en una sala secundaria con supuestas pinturas decorativas de Kokoschka. Las personas con gusto se exponen aquí a sufrir un ataque de nervios”, relataba una crítica de 1983 de la revista vienesa Neue Freie Presse sobre las obras de los austríacos Oskar Kokoschka y Egon Schiele. A pesar de que en la actualidad nos encontramos con otro tipo de sociedad, las obras de desnudos de Schiele siguen generando controversias en el mundo del arte.

¿Arte o perversión? El debate comenzó por la propuesta del Pabellón de la Secesión o más conocido como Sezession (un pabellón de exposiciones de Viena), con motivo de homenajear el centenario de la muerte de Schiele, de cubrir las paredes de la capital de Austria con exposiciones de los retratos de desnudos del pintor. Y aunque varios países de Europa se sumaron a la campaña y accedieron a publicitar en sus calles las obras del artista vienés, no sucedió lo mismo en Alemania y en el Reino Unido. La negativa de estos dos países tiene una razón: aducen que las pinturas de Schiele son pornográficas, y no consideran ético mostrar los genitales públicamente.

Aún así, la Oficina de Turismo de Viena hizo oídos sordos a los reclamos y llenó los andenes del metro de Londres y de Berlín con pinturas del artista, pero tapando las partes íntimas de los retratos con carteles que decían: “lo siento, tiene 100 años pero sigue siendo demasiado atrevido para hoy”. La movida no tardó en difundirse rapidamente por Twitter con el hashtag #ToArtItsFreedom, en español: “para el arte es libertad”.

A favor y en contra

Las periodistas del periódico español El diario Mónica Zas Marcos y Cristina Armunia redactan que aunque el pintor no era un representante del feminismo, sí fue un revolucionario de la libertad sexual al mostrar el cuerpo humano en su máxima expresión. “Aunque Schiele no representase el cuerpo de las mujeres como un acto reivindicativo, todo lo que sea acercarnos al mundo de las vulvas bienvenido sea”, afirman. Por su lado, la periodista Lorena Maldonado, del diario El Español, escribió: “Lo que podía haber sido una celebración artística mutilada en lo esencial se ha convertido en una bofetada sin mano al arte fresco y desprejuiciado que rompió hace un siglo con el academicismo o el impresionismo”.

Los opositores al arte de Schiele usan como argumento que el pintor fue arrestado por denuncias de pedofilia y perversión sexual porque había retratado niños desnudos en el pueblo austríaco de Neulengbach. Eso ocurrió en 1912.