Cartas de lectores
28 Diciembre 2017

Defensa de jubilados transferidos

Mi impresión es que cuando se lea esta carta, una parte importante de los tucumanos estará de acuerdo con la bronca, la amargura y la impotencia que sentimos todos los jubilados y pensionados provinciales y municipales transferidos de Tucumán. Un aspecto relevante del origen de este estado de ánimo se relaciona con la publicidad que últimamente aparece en los medios televisivos, en la que se ve al ex gobernador, hoy senador nacional, José Alperovich, repartiendo viviendas, herramientas de trabajo y artículos para el hogar entre gente carenciada. No se le reprocha el hecho de que entregue esas ayudas a las personas que realmente lo necesitan. Lo que molesta y desagrada es la “teatralización” de querer demostrar el cariño y el aprecio (¿simulado?) que el senador siente por la gente. El pueblo tucumano debe tener memoria. Este señor fue durante 12 años gobernador de la provincia y durante su gestión murieron unos 20.000 abuelos esperando una promesa que nunca la cumplió: pagarles la movilidad y la porcentualidad jubilatoria luego de trabajar 30 años o más. Les negó derechos alimentarios. Es por eso que los jubilados transferidos, que todos los miércoles desde hace más de 15 años realizamos una marcha alrededor de la plaza Independencia, lo invitamos al ex gobernador a que la próxima “publicidad” la filme en el principal paseo público de la ciudad. Que aparezca en las escenas abrazando a cada uno de los jubilados y en otras que reconozca su error de gestión. Y que prometa que hablará con el actual gobernador y le pedirá que cumpla con la Ley 7.652 de Movilidad Provincial, y así se actualicen los haberes injustamente “congelados” desde 2009 a la fecha. También quiero recordarles a los tucumanos que este señor Alperovich no realizó, durante su mandato, ninguna obra de envergadura relacionada con la construcción de diques, ni defensas en los ríos para evitar inundaciones. A través de declaraciones a LA GACETA (22/12), el ex primer mandatario dice hoy que la amenaza de “avanzar” del río Marapa, es un “drama” que se remonta a 13 años hacia atrás y que este año empeoró. Por todo expresado, pido al ex gobernador y al actual mandatario que muestren un poco de arrepentimiento y cumplan con el mandato otorgado en las urnas, que es el de velar por el bienestar del pueblo. Así, les dejo una frase que recuerdo haber leído: “Los viejos que no defienden sus derechos, seguro que murieron jóvenes”.

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Carlos Núñez

Paraguay 3282

San Miguel de Tucumán


El pseudo peronismo de hoy

El partido Laborista, luego Peronista, después Justicialista y por último devenido kirchnerista, se encuentra en un intrincado laberinto por la falta del trasvasamiento generacional, ese que siempre reclamaba su fundador. En un análisis desapasionado, se puede comprobar que el tiempo le dio la razón con hechos que hoy contrastan con su concepción original. Por citar algunos puntos: durante los dos primeros mandatos de Perón, era terminantemente prohibido vender bebidas alcohólicas los domingos y feriados, para evitar el ausentismo laboral y/o la falta de rendimiento al día día siguiente (generalmente por “amanecer mal barajao”). Y aquel comerciante que violaba esta disposición, sufría la clausura del negocio, una multa y hasta podía ir preso. Al mismo tiempo, la medida limitó toda suerte de concursos de artículos comerciales, por considerarlos un engaño para los clientes en cuanto a calidad y precio. Por otro lado, creó las Subsecretarías de Trabajo Zonales, para registrar a los peones en el Libro Único, rubricado por los patrones. Esta disposición generó los aportes jubilatorios, entre otros beneficios previsionales. En cuanto a los hechos de corrupción, a poco de asumir su primer mandato en 1946, relevó a su Secretario de Hacienda (Miguel Miranda), el que tuvo que exiliarse en Uruguay en calidad de desterrado. Otro tanto ocurrió años después con su cuñado y a la vez funcionario (Juan Duarte), situación que lo llevó a quitarse la vida. Por otro lado, para evitar el pedido de donaciones públicas invocando fines sociales de asistencialismo, creó la Fundación Eva Perón y luego la elevaría a Secretaría de Bienestar Social de la Nación, también para no caer en la dádiva y en la mendicidad. En tanto, la marcha original partidaria “Los muchachos peronistas”, decía: “combatiendo al capital”. Pasó el tiempo y alguien le advirtió que la inversión de capitales es una necesidad para el desarrollo de cualquier gobierno de turno, por lo que se la modificó. Y cuando regresó de su largo exilio en España, y tras asumir la tercera presidencia, en su primer discurso señaló: “cada argentino debe producir por lo menos lo que consume”. Este pronunciamiento le valió un gran enojo, y por eso expulsó de la Plaza de Mayo, tratándolos de inverbes, a una gran concurrencia que lo cuestionaba. Por muchos años usó la frase “para un peronista no hay nada mejor que otro peronista”, y la “agiornó” luego reflexionar por otra parecida, pero más abarcativa: “para un argentino no hay nada mejor que otro argentino”. Perón sostenía que el peronismo nació como un movimiento (no telúrico), dando a entender que tenía que evolucionar según los tiempos y conforme a la marcha del mundo. Por eso, entre otras alternancias, el peronismo fue frentista y/o aliancista, para darle cabida a otras expresiones políticas. A todo esto; ¿qué diría Perón si despertara y se encuentra con este pseudo peronismo de hoy? Sin dudas, le daría un “patatús”.

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Ysmael Díaz

Mario Bravo 247

Banda del Río Salí


El nuevo relato del presidente

La soberbia es la peor consejera. Ese es el nuevo relato del Presidente sin usar la cadena nacional. Lo dijo en una entrevista de una televisora privada. Lo lamentable de los que la vimos y la escuchamos nos dejó completamente impactados. Pretende hacernos creer que está diciendo” la verdad”, que en realidad es “la mentira”. Y es más preocupante aún que él se lo crea. Siempre pregonó -y lo sigue haciendo- que gobernará con la verdad; pero debe cumplir con lo que prometió si es que pretende gobernar con dignidad. La década del 70 se caracterizó por los horribles episodios que terminaron con la desaparición de casi 30.000 personas, repudiados por la humanidad. La década del 90 se caracterizó por la expulsión del mercado laboral de tres millones de personas por la inhumana política de un gobierno democrático, situación de la que nos resulta difícil salir porque se incrementaron la desocupación y el trabajo precario. Desde principios del siglo XXI millones de argentinos viven por debajo de la línea de pobreza. ¿No se trata acaso de una terrible violación de los derechos humanos, dentro de los que nos encontramos casi el 80% de los jubilados, que estando en actividad pertenecíamos a la clase media, clase que en nuestro país se encuentra en vías de extinción? Y ahora la parodia de la aprobación de la Reforma de la Ley Previsional (que en realidad es la modificación del índice de movilidad), con la pretensión de querernos introducir en nuestras cabezas que con menor incrementos en nuestras jubilaciones tendremos mejor poder adquisitivo. Este Gobierno ¿debe seguir cometiendo los mismos errores que nos llevaron a estar cada vez peor? ¿Porqué debemos seguir tropezando con las mismas piedras? ¿Todo eso en nombre de la verdad? Hago votos para conservar la esperanza de que esta situación cambie y se rectifique a tiempo, que es lo que nos falta a nosotros los jubilados para poder disfrutar un presente más digno, el verdadero jubileo.

Federico Yurcovich

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Mauricio, “nobleza obliga”

Noblesse oblige, una expresión ya en desuso, se refería al comportamiento adecuado, esperado y obligado de los nobles franceses y personas de alto rango que habían sido privilegiados con riqueza y honores por su cuna. Hoy diríamos que el que tiene los medios, debe respetar al que no los tiene y exhibir humildad cuando quizá desearía compartir las fotos de sus cornucopias y trofeos. Se cuenta que para enseñar el concepto a un noble que había maltratado a un campesino, Luis XIV lo dejó sin pan durante una importante cena. La reina María Antonieta, por el contrario, no entendió bien la idea y no es exagerado afirmar que sus excesos y ostentación contribuyeron a la caída de la monarquía francesa y el colapso de toda una sociedad. El escritor humanista Stephan Sweig da muchas razones válidas para excusar y comprender a María Antonieta en su excelente libro de Biografías. Pero no podemos justificar del mismo modo a un jefe de Estado que, habiendo tenido riqueza y educación desde su cuna se jacte casi con picardía infantil, de haberse atracado con medio kilo de turrón cuando muchísima gente no pudo cenar en esta Navidad pasada. De hecho, Mauricio Macri no parece ser consciente de que no todo el mundo puede estar de vacaciones en los countries más exclusivos, hacer regalos para las fiestas , o disfrutar de suntuosas cenas. En la era de la sociedad conectada no hay lugar para la falta de delicadeza y consideración por parte del rico y poderoso, hacia el desamparado. Especialmente cuando se trata de un presidente que le quita a este último para darle al primero. Noblesse oblige.

Leonardo Peusner

[email protected]


Una calidad de vida mejor

No soy buena para escribir cartas, pero en estas Fiestas no quería dejar de contar esta historia y de paso agradecer a una persona desde el corazón, por tratarse de un excelente ser humano. Soy mamá de dos niños, pero el más pequeño es especial. Desde temprana edad tiene diagnosticado “kernicterus”, que es un tipo de daño cerebral muy poco frecuente que se da en un recién nacido con ictericia grave. Sentí en mi propia piel lo que es ese diagnóstico. Entendí lo que significa ser discriminado. Por su patología, él no va a desarrollarse, y todos me dijeron que solo puedo brindarle calidad en su vida con la estimulación. No sabía a dónde ir. Por eso fui golpeando tantas puertas para brindarle esa calidad de vida, pero no obtuve respuestas. En el subsidio de Salud supliqué, padecí y hasta lloré esos días en los que no entendía por qué tratan con tanta frialdad a los afiliados. Seguro que hace falta calidad y humanidad en la atención del Subsidio. Pero aquel día me crucé con una empleada que, al ver mi desesperación, se acercó y me ayudó. En ese momento ella estaba en el área de gerencia prestacional. Le conté todo lo que me había pasado, y desde ese momento me acompañó y explicó con paciencia cómo hacer las notas (ya que en informes nunca pudieron asesorarme, menos asistirme), me guió con empatía y educación con todos los trámites, y cómo seguirlos. Jamás me trató mal como hicieron otros empleados. Por eso mi hijo José Leandro y yo, y toda mi familia, queríamos de alguna forma destacar la actitud y humanidad de Romina Bazán, y por ponerse en mi lugar y transformarse en mi guía. Los padres de niños especiales sabemos lo que es batallar con el Subsidio de Salud. Las autoridades, como ella, deberían buscar la manera de hacer menos complejos los trámites de atención. No sé si en el Subsidio hay reconocimientos a sus empleados excelentes. Pero mi familia y yo no podemos dejar de hacerlo con Romina.

Sandra Isabel Valenzuela

B° 5 de octubre, Manzana 42

San José - Tafí Viejo

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